La expedición de un profesor de mineralogía, su sobrino y un guía al interior del globo. La segunda aventura de una larga serie. En esta ocasión, el escritor francés, se encarna por partida doble en la persona del profesor Lidenbrock, un excéntrico científico alemán, y su sobrino Axel, joven aún y huérfano, aprendiz de geólogo, que vive bajo su protección. El objetivo de la aventura que les une a los dos es demostrar que se puede llegar hasta el mismísimo centro de la Tierra siguiendo las huellas de Arne Saknussemm, un antiguo escritor del siglo XVI, investigador y viajero, que dejó un manuscrito secreto con las claves para realizar la expedición.
He llegado al libro correcto de Julio Verne, por fin. 😭 El señor Lidenbrock encuentra unos jeroglíficos que al descifrar revelan que uno puede llegar al centro de la Tierra y como este hombre es más ambición y profesión que persona, decide ir y recorrer él mismo ese viaje. Acompañamos en esta aventura descocada al geólogo Lidenbrock y a su sobrino, Axel, que se ve arrastrado por su tío. Creo que al ser Axel quien cuenta la historia me aligeró bastante la lectura e hizo que pudiese disfrutar el libro entero. Este autor escribía de una manera bella, atrapante y cautivadora. Puedo decir que entiendo el porqué tantas personas aman a este autor.
Disfruté inmensamente la lectura de este libro. Soy amante de las historias de aventura, y Julio Verne es sencillamente excente en este género. Es muy fácil imaginarse a uno mismo en el lugar de Axel, no solo porque su forma de enfrentar el viaje es en mi opinión la más natural (con miedo pero también con curiosidad y emoción) sino también porque Verne describe los hechos de manera clara y explícita. Cada miedo, duda, emoción o sorpresa de los protagonistas se puede sentir como propia. Los hechos y datos científicos que se leen no resultan para nada pesados, sino por el contrario agregan más emoción y hacen que el libro sea más interesante, sobre todo tendiendo en cuenta la época en la que de escribió. Sin duda alguna recomiendo la lectura de este libro.
Por ser la primera novela de ciencia ficción y la primera que leo del autor, no estuvo mal. ¡Fué una gran aventura, llena de emociones! Una travesía de mucha ciencia, con buena descripción y aunque con bastantes palabras técnicas (mineralogía, geología, paleontología, naturalista) que tendían a embolatar la lectura fué más la imaginación. El personaje de Axel me desesperaba por ser tan esceptico, temeroso, débil. Me hubiera gustado tener un tío como el profesor Lidenbrock que me enseñará ese mundo de la ciencia. Genial!!! Recomendado para aquellas personas que gustan de las expediciones.
Novela de Julio Verne, publicada el 25 de noviembre de 1864, que trata de la expedición de un profesor de mineralogía, su sobrino y un guía al interior al interior de la Tierra.
Axel viajará junto con su tío y Hans un guía Islandés a una aventura al centro de la tierra, aunque la misma signifique viajar en el tiempo del conocimiento.
¡Qué gran aventura hacer un viaje al centro de la Tierra de la mano de Julio Verne! Axel, un joven con una vida apacible y académica en Hamburgo (Alemania), se ve obligado -más bien arrastrado- por su tío Otto Lidenbrock, un famoso profesor de mineralogía y dueño de una personalidad obsesiva, a viajar al centro de la Tierra, pues otro ya lo ha hecho hace 300 años. Ambos y Hans, un guía que ya quisieran tener los más grandes aventureros de la literatura, vivirán mil peripecias en el camino y lucharán por sobrevivir en un "mundo salvaje". Verne se luce con los datos científicos (algunos los comprobé) y te hace vivir en carne propia las angustias del pobre Axel. ¡Viajen al centro de la Tierra! ¡Soelvertu! (Sed felices/saludo islandés). Lectura: 6/2021.
Mientras el corazón palpite, en tanto que la carne viva, no admito que un ser dotado de voluntad se entregue a la desesperación.
Mientras el corazón late, mientras el cuerpo y el alma siguen juntos, no puedo admitir que cualquier criatura dotada de voluntad tiene necesidad de perder la esperanza en la vida.
Mientras el corazón late, mientras el cuerpo y alma siguen juntos, no puedo admitir que cualquier criatura dotada de voluntad tiene necesidad de perder la esperanza en la vida".