SOSTIENE PEREIRA

Sostiene Pereira que llevaba una vida cómoda y conformista, plácida y aburrida de periodista cultural en periódico católico hasta que llegó Monteiro Rossi. Sostiene que le contó a la foto de su mujer muerta, que el chico le parecía el hijo que nunca tuvieron, y a raíz de su encuentro con él, algo comenzó a removérsele por dentro. Sus convicciones de vida comenzaron a quebrarse. Las charlas con el joven, sus revolucionarios artículos nunca publicados, le abrieron los ojos a la realidad de la Lisboa de 1938; el Portugal controlado de Salazar, la dictadura. Y Pereira escucha, conversa y se implica. Y su mundo se da la vuelta, porque a pesar de sus problemas cardíacos, su corazón aún late. A riesgo de repetirme, es lo que he sentido con esta novela, un latir descompasado, un pellizco al corazón, el sufrimiento ante lo que está por venir... Pereira conmueve, su ternura y una lealtad de las que ya no existen, también. Y el joven muchachito idealista te contagia su fe en la lucha por los derechos, por la justicia y la libertad. Son tiempos terribles para los portugueses. Y Pereira va a descubrirlo, al fin. Una novela grandiosa en apenas 120 páginas. De mis favoritas, sin duda, de este año. Y hay película. Sería la última que Marcello Mastroianni protagonizara. Merecen, novela y filme, muchísimo la pena.

Sublime! No puedo encontrar mejor adjetivo para describir esta novela. Tabucchi domina magistralmente el arte de escribir con una prosa hermosa y sencilla para evocar la atmósfera tensa que se respiraba en Lisboa a finales de los años 30 del siglo XX. El autor nos traslada al Portugal de 1938, donde la dictadura opresiva de Salazar va apoderándose de cualquier atisbo intelectual. Con una guerra civil en el país vecino y un fascismo in crescendo en la Europa occidental. Pereira, el personaje principal, es ante todo un hombre tranquilo y común; un periodista solitario, viudo, con algún que otro problema de salud, que trabaja como responsable en la sección cultural de un diario vespertino de Lisboa. Para su sección, Pereira contratará a un joven recién licenciado en Filosofía para escribir necrológicas, que le dará un nuevo sentido a todo lo que gira en su alrededor. El encuentro con dos jóvenes anarquistas e idealistas, también dará un vuelco a su visión del mundo… y a su vida. Sostiene Pereira es una novela corta, impecablemente escrita, donde se narra la historia de un hombre que siguió a su corazón y a su conciencia.

Estamos ante esas pequeñas joyas literarias que llegan a nosotros de vez en cuando,con un personaje al que poco a poco le iremos sintiendo más cerca nuestra y al que acabaremos cogiendo cariño, Escrita de manera sencilla , ligera y con una ironía delicada. Nuestro personaje es un periodista aburrido y solitario que habla al retrato de su mujer fallecida,aún vive en el pasado,el presente es rutinario y deprimente.Su día a día transcurre con hastio y un fuerte miedo sobre la muerte y la resurrección ,todo esto acompañado con su problema cardiaco ,debido a sus malos hábitos y las pocas ganas de vivir.Esto cambiará en el momento que contrata a un joven periodista para su sección cultural, será un antes y un después,se verá envuelto en problemas políticos en la dictadura de Salazar. Una novela que reivindica la importancia del periodismo en momentos de opresión y de sus graves consecuencias . Sin ninguna duda una novela que recomiendo por su sencillez y donde se realza la bondad,la moral y la integridad con nuestro Pereira,en unos momentos en donde todo ello escacea.

En una palabra: INOLVIDABLE. Tenía miedo al empezar y al ver ese estilo peculiar de narración en torno al "sostiene Pereira". Digo ya verás... Pero al final falsa alarma, como falsas resultaron las teorías que nos montamos Aurinka y yo 😂😂😂 y resulta una manera original de contar la historia. En parte, tampoco soy objetivo porque, además de los maravillosos personajes, una protagonista más es Lisboa. Una ciudad que adoro y que es muy especial para mí. Así que ya solo con recorrer el Terreiro do Paço, la Avenida da Liberdade o el Castillo de San Jorge ya me tenía ganado. Pero me habría conquistado igual de haber transcurrido en Burguillos del Cerro o en Vladivostok. Por la ternura que me ha inspirado Pereira, el personaje principal, y por todo lo que refleja y lo que esconde. Con estilo muy observador, objetivo y casi galdosiano, nos presenta un país que está sucumbiendo al totalitarismo y la dictadura. Como tantos en ese momento en Europa y tantos otros lo han sufrido y siguen sufriendo hoy. Una muestra más de que la democracia y las libertades hay que cuidarlas o podemos volver a esto en cualquier momento. Nos presenta un personaje que evoluciona (o que, quizá, simplemente, sea una buena persona). Nos habla de cuan importante es muchas veces salir de la monotonía, de la comodidad y tomar partido (mojarse el culo como diría mi madre). Y lo hace en buena medida a través de la literatura. Y poco más puedo decir porque este libro, simplemente, hay que leerlo. Es imprescindible. Solo añadiré que tiene uno de los mejores finales que he leído nunca. Por más Pereiras y más gente buena en este mundo. 29 de marzo de 2023

Hace años vi la película y me aburrió soberanamente. No me había planteado leer el libro pero siempre pensé que seguramente me gustaría más. Al final, gracias a una lectura conjunta le di una segunda oportunidad. Esperaba de él una buena ambientación por las calles de Lisboa, una ciudad que me encanta, y eso sí lo he encontrado. La Lisboa bajo la dictadura de Salazar (1938) será la que nos acompañe al seguir el día a día de Pereira, un periodista encargado de la sección cultural del Lisboa, un periódico de línea católica. Un hombre viudo que lleva una vida marcada por la monotonía y las costumbres. Su trabajo, las omelettes a las finas hierbas, la limonada y sus conversaciones con el retrato de la que fuera su esposa conforman su rutina. Así que no podemos esperar grandes acontecimientos en este relato. Por suerte encontraremos referencias literarias que enriquecerán la historia y un personaje entrañable en Pereira. Monteiro Rossi, un joven idealista que empezará a trabajar con él, alterará su rutina y le hará plantearse questiones políticas que desencadenarán en reflexiones filosóficas interesantes, llevándole a despertar de la burbuja en la que vivía para abrirse al mundo que le rodea, pero con las se hubiera podido profundizar más. La acción se precipitará al final y terminará de forma inesperada pero satisfactoria, dándole sentido y valor a todo lo leído. Pero, aunque el final sea acertado, el camino ha sido demasiado lento, la narración muy monótona, por momentos aburrida. Me ha gustado leerlo, pero no me ha transmitido demasiado. Entiendo que es un canto a la libertad de expresión y una crítica sobre el momento dictatorial que se estaba viviendo en Portugal y en los países europeos, pero su desarrollo me ha parecido pobre. Para mí, un "clásico" algo sobrevalorado, pero puede ser que mi predisposición para la lectura no haya sido la mejor. No quiero desanimar a nadie para leerlo ya que gusta mucho a la mayoría.

Pereira... más que sostener es sostenido por el puñado de circunstancias que le ha tocado vivir. Ante las cuales podría, como había sido hasta conocer a Montero Rossi, seguir siendo el desangelado y un poco reaccionario responsable de la página cultural de un periódico lisboeta poco importante. Si claro, tras su aparentemente tediosa vida existen una esposa fallecida, una cardiopatía incómoda, un sobrepeso que es mas moral que físico. Existen también ciertos personajes que interaccionan con el protagonista,pero lejos de influirle o equilibrarle refuerzan la personalidad ( digamos su alma hegemónica). Pero al contratar al subversivo Montero Rossi, todo va cambiando, Pereira sostiene que ese es el punto de inflexión que da a su vida el impulso para dejar de manifestar su rebeldía a través de la simple traducción de cuentos franceses en su página cultural, y hacerlo mediante un acto de absoluta subversión, la denuncia abierta del régimen dictatorial Salazarista, en los albores de la gran guerra. Sostiene Pereira que era una necesidad, un acto cuasi heroico de los que tanta falta hicieron en su época y siguen ausentes en la nuestra. Sostiene Tabucchi que Pereira era un personaje en busca de su autoría, Y yo sostengo que me ha calado hondamente, y me ha conmovido profundamente. Sostengo además que la sutileza de Tabucchi, supera con mucho la aparente simpleza del lenguaje, convirtiéndolo en un arma de estilo y denuncia.

Me costó entrar la vida ,pero una vez entrado y sin darme cuenta....¡ Me ha encantado ! El personaje de Pereira es delicioso, un personaje redondo. Te recomiendo que lo leas solo por el placer de leerlo, sin expectativas y saboreando cada palabra de Tabucchi, no será lo último que lea de este escritor. Sostiene Pereira !

Es un libro con un personaje entrañable, Pereira. De una prosa magnífica, como es costumbre de Tabucci. Es una historia simple, protagonizada por el mencionado Pereira que esconde hondas reflexiones que dejan pensando al lector; o por lo menos eso me pasó a mí. Arranca un poco lento, pero se pone cada vez mejor las cuestión a medida que se avanza en la lectura del libro. Recomendado.