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Sinopsis de SEROTONINA
Reflexión de una sociedad opulenta, que no encuentra respuestas, solo la depresion. Florent-Claude Labrouste tiene cuarenta y seis años, detesta su nombre y se medica con Captorix, un antidepresivo que libera serotonina y que tiene tres efectos adversos: náuseas, desaparición de la libido e impotencia. Su periplo arranca en Almería –con un encuentro en una gasolinera con dos chicas que hubiera acabado de otra manera si protagonizasen una película romántica, o una pornográfica–, sigue por las calles de París y después por Normandía, donde los agricultores están en pie de guerra. Francia se hunde, la Unión Europea se hunde, la vida sin rumbo de Florent-Claude se hunde. El amor es una entelequia. El sexo es una catástrofe. La cultura –ni siquiera Proust o Thomas Mann– no es una tabla de salvación. Florent-Claude descubre unos escabrosos vídeos pornográficos en los que aparece su novia japonesa, deja el trabajo y se va a vivir a un hotel. Deambula por la ciudad, visita bares, restaurantes y supermercados. Filosofa y despotrica. También repasa sus relaciones amorosas, marcadas siempre por el desastre, en ocasiones cómico y en otras patético (con una danesa que trabajaba en Londres en un bufete de abogados, con una aspirante a actriz que no llegó a triunfar y acabó leyendo textos de Blanchot por la radio...). Se reencuentra con un viejo amigo aristócrata, cuya vida parecía perfecta pero ya no lo es porque su mujer le ha abandonado por un pianista inglés y se ha llevado a sus dos hijas. Y ese amigo le enseña a manejar un fusil...
33 reseñas sobre el libro SEROTONINA
Reconozco que me he tirado gran parte de la novela odiando al cretino del personaje, pero finalmente me enganchó su decadencia, su forma de pensar y de ver el mundo, influenciados por su estado depresivo. Alguien cuya vida se ha vuelto tan plana y tan sin sentido que se resigna y limita a estar, sin ser.
Amarga reflexión de una sociedad opulenta, que no encuentra respuestas, solo la depresion. Argentina es nombrada varias veces, de poder alimentar a 600 millones de personas y poner en riesgo el trabajo de los agricultores franceses. Me gusto. Me parece sobrevalorada-
"Crisis de los 40s“, sumado a antidepresivos que cortan ánimo y líbido, el protagonista da cuenta de una búsqueda incesante sobre un sentido de vida que funcione, que le haga vivir como quizá aquel pasado donde conoció el amor... Amores que dejó ir por creer que faltaba lo mejor por vivir.
Serotonina, aquella hormona denominada de la felicidad o aquella activada por los psiquiatras para controlar las emociones, así es como vive Florent, en una encrucijada entre sentimientos y emociones que parecen todo el tiempo llevarlo al quiebre entre la vida y la muerte. No solo la suya, sino la de otras personas cercanas a él, ya sean reales o a través de su mirada de un mundo que no vale la pena continuar transitandolo. Una permanente burla al amor, a lo cínico que el autor desprende del mismo, para si y para el resto. Cuestionamientos deprimentes, pensamientos de muerte, y la historia de un hombre solitario narrada por si mismo, en un camino impostergable hacia la nada misma. Personajes que no se hacen querer, y dudas permanentes sobre una depresión que se agiganta y no tiene escapatoria.
El autor tiene un modo atrapante de relatar la historia del personaje, además de reflexiones muy interesantes y controversiales.
De mi primer acercamiento a Houellebecq, puedo decir que el argumento del cuarentón con depresión vinculado a un sistema que te empuja lentamente al derrumbe vital leído en un país con hambre suena a tristeza de chico rico. Sin embargo el tipo escribe bien, sus reflexiones son punzantes y se lee con mucho interés. No conviene confundir la voz del autor, un intelectual de fuste con la personaje, un patán de poco vuelo.
Quizás fue una vez más exceso de expectativas, pero no logré conectar con esta historia. Quizás tenga que ver con el momento en que la leí, no sé, lo cierto es que la diatriba un tanto desordenada del protagonista, un gris empleado del ministerio de agricultura, de mediana edad, depresivo, que cuenta a lo largo de 280 páginas su vida miserable cargada de fracasos sentimentales y de los otros, caracterizada por la adicción a antidepresivos y marcada por la soledad no lograron atraparme. Es de destacar que en tiempos de tanta corrección política y feminismo exaltado, Houellebecq no se priva de poner en boca de su última criatura un manifiesto de misoginia explicita que puede no gustar, pero que no deja indiferente. Y también, la descarnada reflexión, de la que ya hemos leído en otros trabajos suyos, sobre la decadencia del estado de bienestar de la sociedad occidental en base a hedonismo, inmediatez y soledad. Me parece sobrevalorada, pero dado los pergaminos del autor bien merece la oportunidad.
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FRASES DEL LIBRO SEROTONINA
"Volví a la cama casi sosegado, hasta tal punto nos tranquiliza, en medio de nuestros dramas la existencia de otros dramas que nos hemos ahorrado."
¿Era capaz de ser feliz en soledad? No lo creía. ¿Era capaz de ser feliz en general? Creo que es la clase de preguntas que más vale no hacerse.
Comprimido pequeño, blanco,ovalado, divisible. No procura ninguna forma de felicidad, ni siquiera un verdadero alivio, su acción es de otra índole transformando la vida en una sucesión de formalidades, permite engañar. x tanto ayuda a los hombres a vivir, o al menos a no morir
" llegué poco a poco a la conclusión de que los agricultores franceses estaban sencillamente condenados , razón por la cual me liberé de aquel empleo, al igual que de otros, comprendí que el mundo no formaba parte de las cosas que yo podía cambiar"
"No creo engañarme al comparar el amor con una especie de ensueño de dos..... de conjunciones y cruces de caminos, pero que permiten, con todo, transformar nuestra existencia terrenal en un momento soportable, que incluso es, en verdad,el único medio de soportarla"
... la gente se fabrica ella misma el mecanismo de su desdicha, le da cuerda y luego el mecanismo sigue girando, ineluctable, con algunos fallos, algunas debilidades cuando la enfermedad interviene, pero sigue girando hasta el final, hasta el último segundo.
