MOBY DICK

Un clásico que leí de pequeña y que enseña valores fundamentales

La eterna batalla entre el hombre por el dominio natural, en el que la naturaleza es implacable y vencedora; tanta inspiración fue la causada que hasta me hice un tatuaje conmemorativo. Solo amor para este libro, solo amor.

Melville no debió imaginar que su obra se iba a convertir en el leviatán de la literatura norteamericana. Es una enciclopedia de información marina por su elevado vocabulario técnico y un regalo para entrever la esencia del ser humano al llevar al límite sus peores pasiones. Esta obra merece un buen debate, puesto que la moral de varios personajes es bien distinta y eso da para mucho. Llamadme Tirso...

Un clásico.No es una lectura sencilla,pero si consigues no morirte del aburrimiento y el tedio,no es un mal libro.

Tiene muchísima fama y la verdad no la había leído antes pero esperaba muchísimo más de este clasico

No me siento con derecho de calificar un clásico como este con una estrella, por eso le doy dos, pero la realidad es que no me ha gustado. Se me ha hecho súper espeso de leer a pesar de ser tan corto, tengo que decir que llevo años queriendo leerlo y me ha decepcionado bastante, realmente no lo he abandonado por ser el libro que es, no me arrepiento de haberlo leído porque se que tarde o temprano hubiera terminado leyéndolo, pero dudo que vuelva a hacerlo o que lo recomiende. Hago hincapié en que esto es solamente mi opinión, pero es necesario que sea sincera y objetiva con lo que el libro me ha transmitido, y ha sido más bien poco o prácticamente nada.

Es un libro increiblemente complejo por varias razones: entre el simbolismo bíblico y el enciclopedismo marino con una agil aventura (cuando toca) que le da un aire a Stevenson y un bodrio cercano al suicidio cuando se mete en cuestiones técnicas de las ballenas que uno no termina mucho de entender. ¿Vale la pena meterse en 620 páginas de lectura? Veamos: las primeras 250 hojas son, dentro de todo, entretenidas (presentación de personajes; ¿escenas homosexuales?; primer encuentro con Moby Dick); después desvaría con clasificaciones eternas; luego vagan por el mar con historias y encuentro; y, para concluir, uno de los mejores finales que llegué a leer: 60 páginas en que uno quiere saber qué va a terminar de pasar.

A quienes tomaron este libro, y lo encontraron pesado de leer, yo les aconsejaría, simplemente, que cada vez que se encuentren con un capítulo enciclopédico acerca de las ballenas, lo salten. Pero no se pierdan este libro, lean lo que plantea sobre la humanidad y el mundo en que vive. Su relación con la divinidad, con el destino, con la naturaleza y la sociedad. El Pequod es una parte del universo en la que viven juntos un grupo de hombres diversos, y en su diversidad lo ven y lo enfrentan con diferente pensamiento. Starbuck, Stubb y Flask, por ejemplo, hacen el mismo trabajo, pero cada uno lo ve de diferente manera. Así, podemos pensar: ¿cuál es nuestra actitud frente a la vida? ¿a cuál de los tres nos parecemos más? El libro es bueno, vale la pena leerlo (y de nuevo, dejen de lado los capítulos pesados, es posible que después los lean, pero si no es así, no importa).