Coincidiendo con el centenario de su aparición, Impedimenta publica una nueva traducción de la obra maestra de Sōseki, que prefiguraría la de autores de la importancia de Akutagawa, Kawabata o Murakami. «Kokoro» («corazón», en japonés) narra la historia de una amistad sutil y conmovedora entre dos personajes sin nombre, un joven y un enigmático anciano al que conocemos como «Sensei». Atormentado por trágicos secretos que han proyectado una larga sombra sobre su vida, Sensei se abre lentamente a su joven discípulo, confesando indiscreciones de sus días de estudiante que han dejado en él un rastro de culpa, y que revelan, en el abismo aparentemente insalvable de su angustia moral y su lucha por entender los misterios del amor y el destino, el profundo cambio cultural de una generación a la siguiente que caracterizó el Japón de principios del siglo XX. Ninguna biblioteca de literatura japonesa estaría completa sin «Kokoro», la novela más lograda de Natsume Sōseki, la más profunda y la última que completó antes de su muerte.
Muy buen libro para tener, me gusto mucho desde el principio al fin, más aun en la parte del medio del libro. Lo recomiendo
"Kokoro" es una de aquellas palabras que al intentar traducirla, le arrancamos el alma. Referida comúnmente como "corazón", esta palabra no parece ser suficiente para reflejar la profundidad de su significado cargado de emocionalidad, que va mucho más allá, abarcando además la mente, el pensamiento, la esencia y el alma. Bajo este título, se desarrolla una novela melancólica que relata la amistad entre un joven estudiante, ávido por aprender sobre la vida, y un enigmático hombre mayor, a quien el estudiante se refiere desde el comienzo como "sensei", otra palabra difícil de traducir, pero que refleja a la perfección la mirada de respeto y las expectativas que posa el joven estudiante sobre él. Kokoro nos lleva a una época en la que el antiguo y el nuevo Japón aún conviven, y nos muestra, con la tradicional melancolía de la literatura clásica japonesa, las contradicciones de la esencia humana. Es una novela tan japonesa, que resulta una delicia para los amantes de ese otro mundo, tan distinto al occidental, en el que los sucesos ocurren a otro ritmo y tienen una importancia muy diferente. Es sin duda uno de aquellos libros que es necesario leer para conocer otras épocas y otros lugares, y sumergirse en el concepto que da nombre a la novela: Kokoro. Para mí, sin duda requerirá una relectura a futuro, ya que cometí el error de leerlo en una lectura conjunta, cuando es un libro que debe ser leído a ritmo propio. Nota aparte, la edición de Impedimenta es preciosa. Cuesta un ojo de la cara, pero valió la pena.
Las palabras no son sólo vibraciones en el aire. Tienen más poder que eso, pueden agitar con fuerza el corazón de los hombres y sacudirlos.
A mis ojos, él era alguien que hacía florecer el mundo en forma de pensamiento.
—Enfermos o sanos, los seres humanos somos criaturas frágiles. Ya lo sabes. No hay forma de saber cuándo o cómo moriremos, ni siquiera la razón.
"No deberías depender ya de nadie en estas circunstancias. Los jóvenes de hoy en día solo os preocupáis de cómo gastar el dinero, pero no de cómo ganarlo"
—El recuerdo de haberse prosternado ante los pies de alguien puede tornarse en un ansia por pisotear a la persona admirada.
—Te dejas arrastrar por la pasión y en cuanto se te pase esa fiebre, la desilusión te dominará.