En 1960, el reconocido escritor paraguayo Augusto Roa Bastos (1917-2005), Premio Cervantes 1989, publicó este volumen con el que iniciaba un gran tríptico donde historia, política, identidad y moral se funden en un relato de enorme fuerza. Esta novela abarca la historia moderna de su país hasta 1935 y comprende episodios importantes como la guerra contra la Triple Alianza y la posterior guerra del Chaco. Insurrecciones agrarias, el poder y el abuso de la oligarquía, la identidad nacional y la lucha por defenderla son algunos de los temas aquí tratados.
Roa Bastos nos regala una novela cumbre. Fue su primera novela y forma parte de una trilogía...los otros dos títulos son..."Yo Supremo" y " El Fiscal"....este Paraguayo universal consiguió que esté considerada una obra fundamental de la literatura Latinoamericana.En rasgos generales, por resumir... trata sobre todo de la opresión.
Admirable novela de Roa Bastos cuyo telón de fondo es la opresión del hombre y su continuo devenir entre la rebelión y la aceptación de su destino. Libro que se nutre de leyenda, de historias que pasan de un hombre a otro a través del alma guaraní, llena de coraje, temores y supersticiones, con la ingenuidad del que nada conoce pero todo quiere enfrentar. El escenario épico de la Guerra del Chaco (acaso la guerra más importante en Sudamérica en el siglo XX) constituye el lugar donde los sueños de una vida mejor se enfrentan con la dura realidad del día a día de un pueblo cuyo destino parece oscilar entre la rebeldía y la opresión, y donde el hombre lucha para mantener quizá lo único que tiene de valioso: su dignidad. Este libro tiene un definido color local, donde el uso de palabras y modismos del idioma guaraní puede llegar a ser incomprensible para aquellos que no estamos familiarizados con este, pero es también una oportunidad de acercamiento a la comprensión de un pueblo que ha sabido defender y mantener su cultura a través de la historia.
Pedazo de novela, la mejor que he leído de Roa Bastos y eso que él no es precisamente un autor que suelo disfrutar. Es increíble la manera tan cruda y a la vez poética, casi bonita, con la que describe la crueldad de la guerra. La desesperanza está presente en todos lo capítulos. El autor cuenta diferentes historias en todos los capítulos para dar un único mensaje final. Mi favorito fue el capítulo VIII, titulado la Misión, aquí habla de unos soldados que deben llevar agua a las líneas del frente, ocurre durante la guerra del Chaco, en ese capítulo se presenta a unos hombres que saben que van a morir, pero aún así valientemente marchan en el viaje, una mujer que es tratada casi como a una prostituta, que es juzgada por todo el mundo por cosas de su pasado y aún así está decidida a ir con ellos porque hay algo lo suficientemente importante que la impulsa, tanto que se termina infiltrando pese a la negación que recibió al inicio, incluso vemos a muchos huir de la batalla, rompiendo esa imagen casi utópica de los valientes guerreros que mueren como héroes. Hubo un momento que me marcó especialmente, ellos llegan con el agua a un campamento que se ubicaba antes del sitio al que tenían que ir, necesariamente debían pasar por ahí, los soldados de ese lugar pensaron que el agua era para ellos y en esa parte vemos la crueldad con que hombres, a los que el autor describe como esqueletos, ven morir frente a sus ojos todas sus esperanzas. En fin, fue una gran lectura. Al principio cuesta un poco adaptarse al estilo de Roa Bastos, pero una vez los haces se disfruta sin más.
Un libro con muchísima identidad; la historia se desarrolla en el contexto de la Guerra del Chaco, entre Paraguay y Bolivia. El autor nos cuenta como la guerra va repercutiendo en la vida en relación de los soldados, de su familia , de los pueblos, y cómo van sintiendo que van perdiendo su vida por una lucha que no les pertenece, que la ven ajena , y que saca lo peor y lo mejor de cada uno de los personajes. Los detalles de los personajes , la descripción de los pueblos desde sus costumbres y su fe, nos introducen en una historia fascinante, y a la vez triste. Muy bueno.
¡Paraguallísimo como él solo! No existe mejor manera de conocer la cultura y un poco de historia del Paraguay sin aburrirte que esta. Roa Bastos es sublime en su narrativa y la historia que cuenta es tan real que cualquier paraguayo que creció en esa época puede sentirse identificado.
Una novela triste y bella ambientada en el Paraguay de entreguerras. Los personajes están fuertemente relacionados en sus historias, pero sin embargo Roa Bastos apenas los une tenuemente en la trama y en la prosa. Cronológicamente parte desde las consecuencias humanas y sociales de la Guerra contra la Triple Alianza (despojo de tierras campesinas y pueblos lacerados) avanzando hacia las revueltas campesinas y finalmente la Guerra del Chaco, donde dos pueblos pobres se enfrentan en favor de intereses ajenos. En tanto obra literaria, las historias de Macario, el médico ruso y el héroe de la batalla de Boquerón y Juana Rosa condensan los sentimientos de la tragedia paraguaya. El autor no deja atenuantes ni consuelos. Pues la historia paraguaya tampoco.
Dicen que nada hunde más a un hombre que una mujer cuando lo tiene agarrado no por el sexo sino por el alma
Porque el hombre ...tiene dos nacimientos. Uno al nacer, otro al morir...Muere pero queda vivo en los otros, si ha sido cabal con el prójimo. Y si sabe olvidarse en vida de si mismo, la tierra come su cuerpo pero no su recuerdo.
Nadie volvió a traspasar la estera. Pero nadie creyó en su voluntad de purificación. De nada le valió. El pasado impuro y cercano la tenía presa en su jaula como a una cotorra. No la habían juzgado antes. La juzgaban ahora, cuando ella era otra.
Jara aplastó el pucho contra la culata del fusil y lo arrojó a la oscuridad. Pasó el brazo lentamente por encima del hombro de ella y la atrajo sobre el suyo, donde la cabeza de mechones cortados a cuchillo se acurrucó, vencida por el peso de su propia felicidad.
Un montón de semblantes terrosos forcejeaba ante el grifo derrochando inútilmente el agua. Era como una escena de violación y el agua, el cuerpo desnudo de la mujer que se escapaba gimiendo entre los muslos y las caras bestiales de los hombres.