Con elementos del dragón de oro, Isabel Allende recupera su país a través de la memoria y la imaginación. Me llamo Eva, que quiere decir vida, según un libro que mi madre consultó para escoger mi nombre. Nací en el último cuarto de una casa sombría y crecí entre muebles antiguos, libros en latín y momias humanas, pero eso no logró hacerme melancólica, porque vine al mundo con un soplo de selva en la memoria. Mi padre, un indio de ojos amarillos, provenía del lugar donde se juntan cien ríos, olía a bosque y nunca miraba al cielo de frente, porque se había criado bajo la cúpula de los árboles y la luz le parecía indecente. Consuelo, mi madre, pasó la infancia en una región encantada, donde por siglos los aventureros han buscado la ciudad de oro puro que vieron los conquistadores cuando se asomaron a los abismos de su propia ambición. Quedó marcada por el paisaje y de algún modo se las arregló para traspasarme esa huella.
Bellísimo libro de Isabel Allende... Muchos de los paisajes que describe se asemejan a los de mi país. Una historia increíble... Desde el Doctor que trabaja embalsamando cadáveres (leyendas tradicionales también de mi pais). Pasando por ese mágico lugar escondido entre las montañas llamado "La Colonia" que en mi país es una hermosa colonia alemana. Y pasando por todo el relato (político, económico y social) que te mantiene atento a como será el desenlace. Muchas cosas son parecidas a las ocurridas en mi bella tierra. Lindo relato. Muchos recuerdos de la historia contemporánea de mi país. Bellísimo. Lo he leído tres veces. Me encantó.
Buena novela dentro del estilo de Isabel Allende. No puedo negar que me encanta su estilo, pero creo que algo pasó al finalizar el libro. Siento que daba para más, me dejó no muy complacido. Pero sin duda recomendable.
Creo que me hubiera gustado si yo fuera una persona cursi y fácil de atrapar en cuanto a fantasía vaga se refiere. Siento que es de una irrealidad mal llevada para mi gusto. Me gustan otras irrealidades. Se lo recomendaría a mi abuela segura de que le gustaría. Lascividad, romance, lindos personajes, lindos cambios de escenario, cariño, osadía, caos que rozan de costado a la protagonista. Ideal para una señora. Salud
Y espere la madrugada para leer más tranquilo este fascinante cuento que a razón tiene mucho que ver con la vida Real. No podemos tapar el dolor ajeno.
Me ha gustado, pero me queda la duda de qué ocurrió con Humberto Naranjo el primer amor de Eva Luna.
Suspiró, cerró los ojos y al sentir su espíritu vacío como el de un recién nacido, comprendió que en el afán de complacerlo le había entregado su propia memoria, ya no sabía qué era suyo y cuánto ahora pertenecía a él, sus pasados se habían quedado anudados en una sola trenza. Había entrado hasta el fondo en si propio cuento y ya no podía recoger sus palabras, pero tampoco quiso hacerlo y se abandonó al placer de fundirse con él en una misma historia...
Ella sembró en mi cabeza la idea de que la realidad no es sólo como se percibe en la superficie, también tiene una dimensión mágica y, si a uno se le antoja, es legítimo exagerarla y ponerle color para que el tránsito por esta vida no resulte tan aburrido.
Concluí que Elvira tenía razón, hay que ser bien brava, hay que pelear siempre.
A veces, para exorcizar los demonios de un recuerdo es necesario contarlo como un cuento
La muerte no existe, hija. La gente sólo se muere cuando la olvidan, me explicó mi madre poco antes de partir. Si puedes recordarme, siempre estaré contigo."