AFTER DARK

Es una novela temporal, transcurre entre las 12 de la noche y el amanecer. Tiene la particularidad de que cada capítulo tiene un reloj que marca el tiempo transcurrido. En After Dark todo fluye por la noche entre las luces de neón de una gran ciudad y es lector es un simple espectador de los aconteceres y dueños de los personajes, tan distintos tan iguales donde brotan los paralelismos y encuentros entre ellos. Ocurre todo lo que puede ocurrir realmente en una noche, y todo lo que puede ocurrir idealmente en un sueño. Sublime.

Lo he leído por segunda vez después de 10 años y Murakami me sigue sorprendiendo, escribe siempre entre música, gatos y rarezas. Una chica siempre dormida en medio de una habitación vigilada ¿por alguien o por nada? La hermana vagabundeando en mitad de una noche donde conoce y vive personas y situaciones que no imaginó y que en absoluto la sorprenden. La lectura es ágil, entretenida y las páginas vuelan con gran deleite. Siempre seré fan de este escritor.

Historias de una madrugada. Entretenida como siempre.

Es el primer libro que leo de este autor y he de reconocer que es una lectura diferente a la que estoy acostumbrada a leer pero me ha gustado bastante . Una historia sencilla y tranquila que no puedes dejar de leer. Me animaré con otro libro de este autor.

Me costó ponerle nota porque las partes de Eri me han dejado muy confusa y no he sabido muy bien cómo interpretarlas o qué quería transmitir el autor. También me ha parecido un pelín más complejo de leer en general a pesar de lo cortito que es, pero es que la pluma de Murakami tampoco es fácil de leer siempre. Por otro lado, sí que han habido muchas más cosas que me han gustado, por ejemplo, es una libro que te hace pensar y reflexionar con las conversaciones de los personajes y sus vivencias, que es una de los puntos que más me gustan de las novelas de este hombre. También te presenta escenas de un Japón nocturno que quizás algunos no conozcamos tanto y ha sido maravilloso presenciar la ciudad de Tokio bajo la pluma de Murakami, que te muestra únicamente lo que él quiere que veas como espectador/lector. Los personajes no he podido determinar si me han caído bien o no, pero me generaron mucha curiosidad y tienen una gama de claroscuros en la que se nos cuentan partes de su pasado y sus vivencias que hacen que empaticemos mejor con ellos. Resulta curioso que todo transcurra en una noche y dé tiempo a conocer a los personajes (y ellos sobre sí mismos) en un periodo de tiempo relativamente corto pero sin que quede forzado.

Vaya, Murakami logró cautivarme de nuevo y en tan pocas paginas. Creo que desde que te vas leyendo el título (después de la oscuridad) sabes que el tema se tornará interesante, sin embargo, nunca esperas que se vuelva fan reflexivo, filosófico y con toda posibilidad de analizar hasta qué no quede rastro. Si bien, el libro tarda un poco en arrancar y nos confunde con las situaciones paranormales que pasan, el libro solo trata de contarnos lo que nosotros vemos en la oscuridad. Es por eso, que Mari, nuestro personaje principal se topa con una noche llena de cosas que jamás creyó que algún día vería. La segunda parte del libro nos lleva a esa jugosa reflexión que plantea Murakami acerca de la Luz y la oscuridad, de la templanza, de los lazos que nunca se rompen, de lo que sigue después, de los recuerdos, de los buenos y malos ratos. Después de la oscuridad viene la luz, y cuando la luz abunde, tardará mucho tiempo para que nos vuelvan a invadir las tinieblas… Murakami lo hizo de nuevo.

Relato bastante distinto, y a la vez fiel al estilo Murakami. Un relato en versión cinematógrafica, no convencional, en tiempo real desde la media noche, inquietante, donde uno quiere saber a donde llega, más los misterios que tanto gustan al escritor están a flor. Una descripción bastante urbana de un barrio de Tokio donde suceden distintos eventos y encuentros entre los personajes en horas donde el resto de los normales estamos durmiendo. Y claro, el soundtrack que sugiere el japonés como en el resto de sus libros no puede faltar.

Una de esas novelas que hay que disfrutar de madrugada de la mano de un café y de las canciones que el autor recomienda. Uno de los libros que empecé aún sabiendo que tenía malas críticas en muchas páginas webs y que, afortunadamente, me sorprendió. Murakami en estado puro.