REQUIEM POR UN CAMPESINO ESPAÑOL

De todo lo leído del autor esta corta novela es mi preferida y que ha tenido relectura. Esta es la historia de una ingenuidad que termina en un crimen Mosen Millán queriendo salvar la vida de un muchacho, lo entrega a sus verdugos. Quien se oponía al cacique terminaba ejecutado. Me llamó la atención el hecho de la objetividad con que Sénder trata la historia, de forma alejada sin tomar partido, máxime cuando en la Guerra Civil había sido asesinada su esposa embarazada.

De lectura fácil por ser tan cortito y con letra grande. Cuenta la historia desgraciada del protagonista por culpa de la puta guerra civil.

Repaso de nuevo lecturas que hice durante los 80. Esta es una. En ese momento, recogí en mi cuaderno de lectura (un paso previo a esta plataforma en la que nos leemos) "es una novela necesaria, para hacer justicia y equilibrar aquello que pasó para que no vuelva a suceder". Hoy he vuelto a leer la novela y me ha entristecido más porqué aquello que creí que había pasado, lo reconozco como presente y tengo el convencimiento que somos muchos los cobardes "Mosén Millán" y los traidores "Càstulo" i el resto de los que asesinaron a Paco. En canvio veo pocos Pacos, valientes y decididos a actuar con justicia.

Obra maestra de la literatura española. Libro de pocas páginas pero que bastan al autor para narrar un episodio que pudo haber ocurrido en los albores de la guerra civil. Mosen Millan, cura de un pueblo que no se nombra pero que por lo que dice pudo estar pensado en la provincia de Huesca; ofrece una misa de Requiem por Paco el del Molino, un hombre que el cura crió como si fuera su hijo. El Cura, a la espera de que llegue la familia del muerto para la misa va recordando la vida de este hombre desde su niñez hasta su madurez. El Autor nos da diversos personajes: D. Valeriano administrador del Sr. Marqués, terrateniente de la mayor parte de las tierras del pueblo y propietario de tierras a su vez. D. Gumesindo igualmente propietario de tierras y don Castulo que jugaba a dos barajas tratándose de llevar bien con los Señoritos el pueblo y con la gente labradora. Su automóvil sirvió de vehículo en la boda de Paco y también de confesionario a la hora de su muerte. Critica la pobreza de aquella época para la mayoria de la gente, incluso había quien tenía que vivir en cuevas sin luz ni calefacción ni siquiera una mala cama donde dormir. Critica también la desfachatez de los nacionales que asesinaban por la noche para que no los viera nadie y dejaban los cadáveres en las cunetas de la carretera. También critica al Clero en la persona del padre Millan que cierra los ojos ante la pobreza y la miseria en que viven las gentes de su pueblo diciéndole a Paco que aún había gente que vivia peor y que era designio de Dios que no se pueden explicar. Tanto el cura como D. Valeriano y D. Gumesindo que en el fondo no tenían la conciencia muy tranquila porque sabian que habian matado a un inocente; tratan de paliar sus culpas a la manera cínica que tienen los beatos: El Cura ofreciendo una misa por su alma. Los otros dos ofreciendose a pagar la misa porque así le serán perdonados sus pecados. Nadie del pueblo fue a la misa de Requiem. El Pastor había perdido la confianza de sus ovejas.

Requiem por un campesino español es una novela corta (sobre unas 100 páginas) que lees en un suspiro. La novela es la vida de un joven contada por Mosén Millán ,el cura del pueblo. A través de su relato ,en el que se pueden a preciar sentimientos como el cariño y la culpabilidad, conocemos también un poco más a la sociedad española de la época. Un gran libro para salir de un bloqueo lector.

Una historia más de la España salvaje de los años treinta. Asesinato de un campesino. El estilo es poco fluido, aunque se deja leer.

Hace un par de años que me aficioné a la novela corta. Pudo ser por el tiempo escaso que tengo en ocasiones para leer, pero ciertamente he encontrado en la brevedad una esencia difícil de ver en novelas demasiado extensas. Supongo que esto se debe a que comprimir todo un estilo en unas ochenta páginas es merecedor de todos mis respetos. Requiem por un campesino español fue una de las primeras noveletas que cogí y acabé en cosa de una tarde. Tuve que releerla a los pocos meses, me vi obligado. Lo más llamativo de esta obra es la perfecta alternancia que hay entre un presente pausado donde la religión carece ya de todo sentido con un pasado animoso y pastoril en el que las tradiciones populares y la vida hogareña se nos muestran con todo el gusto, a la vez que la oscuridad de una guerra que destruye, más que a las personas, a todos los pilares que daban algo seguro sobre nuestras vidas se cierne sin remedio. La enemistad más cruel, esa que surge del absurdo de nuestras creencias y acaba por regalarnos una finalidad ambigua y problemática, se convierte en un dilema del que el protagonista no puede escapar. Los escenarios y narraciones de las gentes pueblerinas que bailan y celebran, de los entresijos del alma del sacerdote, que ha perdido la noción del bien y del mal, de las supersticiones en contra de los principios eclesiásticos son todo un complejo ramaje de símbolos inimitables. Forma, sentido y sentimiento quedan unidos sin fisura en una novela que despierta en nosotros esa sensación de ruina que penosamente acaba con la concordia de toda una sociedad.

Lectura más necesaria que nunca, con el fascismo no soterrado, que campa a sus anchas; Breve, conciso y brutal, una toma de conciencia en 100 páginas. Imprescindible.