Una recreación de la vida de Cicerón y del Imperio romano, considerada todo un hito literario. Una apasionante novela donde se cruzan las intrigas palaciegas, las pasiones y los crímenes, y donde salen a relucir las cuestiones que más preocupaban a Cicerón: la religión, la política y la guerra.
He leído por fin este libro, y digo por fin porque este título es de casi mil páginas más que un reto una epopeya. Dejando atrás el tamaño del libro y el tipo de letra, puedo decir sin temor que La Columna de Hierro es un gran escrito, un subir y bajar de emociones que te logra meter en la ensoñación de la historia, la escritora logra pintar en tu mente un Senado o una Roma antigua al igual que a un César y a un Cicerón. De tramas ocultas y una gran propuesta como novela histórica te recomiendo leer La Columna de Hierro de Taylor Caldwell. Es más te digo sinceramente que este libro estará en tu top diez de favoritos, sin dudarlo.
La autora idealiza demasiado a los personajes además de pasarlos por un filtro de cristianismo nada discreto. Podría pasar esto por alto de no ser porque se enfoca en una niñez y adolescencia aburrida y tediosa cuando lo verdaderamente interesante es la etapa de adultez y el final de la vida de Cicerón, etapa a la que solo dedica 100 páginas de las casi 900. Pienso que no disfrute del todo la lectura porque ya conocía la historia, he leído a tan célebre personaje y conocía lo suficiente sobre su vida como para hacerme una imagen mental de él. Confiaba en que este libro fuera un buen resumen que lograra llenar los vacíos de la historia con una buena pluma e investigación suficientes, pero no ha terminado de convencerme la visión de la autora.
Un libro que te lleva a la más hermosa de las civilizaciones antiguas, los romanos, desde la vista de Cicerón se conoce la ciencia del derecho, que de todos los derechos del mundo solo el romano fue el más bello, por sus instituciones y leyes.