ESTUPOR Y TEMBLORES

Pues mucho no me gustó. Pero esa es mi opinión.

En este corto libro nos relata un período corto de su vida. Lo que le paso cuando trabajaba para una gran empresa de Japón. Un trabajo al que llegó ilusionada porque ella nació allí y pasó los primeros años de su vida. Lo más importante para mí de esta historia es como reaccionó ella. Se ve que para ser muy joven entonces ya tenía un autocontrol muy importante y también mucho orgullo. No se si, como ella dice, basándose en lo que hace David Bowie en una película famosa. En todo caso demostró a los Japoneses que no se puede transformar a un Occidental en Oriental. En todo caso lo que si deja de una manera muy clara es la mentalidad que tienen los japoneses. Nos informa de que concepto tienen ellos de lo que es una empresa y de como se debe organizar una empresa. Que todo esto es aplicable a la vida en general porque para el japoneses lo más importante es el trabajo. Nos habla también del papel que tiene la mujer en la sociedad japonesa, demostrándonos que ellas lo ven como algo normal. Afortunadamente como ella dice sutílmente hay algunos japones que no lo ven bien como Tanizaki y otros. Una cosa es el japones fuera de su pais y otra muy distinta el japones en su pais. Es decir, no es lo mismo entrar a trabajar en una empresa japonesa en España o cualquier otro pais que en una empresa japonesa en Japón.

Me lo he pasado muy bien....me he reído mucho. No entiendo la mentalidad japonesa....no la concibo por mucho que lea...y esta historia me ha parecido refrescante y casi se me ha olvidado mi resquemor.

Qué excelente lectura que devela las imperfecciones de una cultura conocida por ser llena de honor, pero que demuestra que la tradición no sólo arrastra las cosas buenas. Un compendio de paradojas y distintas voces de una mujer inteligente que soporta los abusos laborales y los maneja a su forma de ser única. Muy recomendada esta historia.

Los japoneses son bastante raritos, sin apenas separación entre trabajo y vida personal. Fácil de leer.

Con estupor y temblores es como debían presentarse los súbditos del emperador del Imperio del Japón, aplica perfecto esta analogía a la novela, por la forma en que se representa el universo de jerarquías en Yamamoto, una de las empresas japonesas más importantes a nivel mundial, la compañía donde entra a trabajar Amelie Nothomb. A los 22 años al entrar en Yamamoto Amelie se enfrenta una doble desventaja, ser mujer y ser occidental, luchando contra corriente en un ambiente misógino y de sumisión absoluta de los empleados y sobre todo de las mujeres, que en toda la empresa solo son cinco las que tienen el privilegio de trabajar, aunque es una chica inteligente no atina a desempeñar correctamente las funciones que le asignan y sin embargo no decae su ánimo y con un actitudes desconcertantes soporta ir descendiendo cada vez más en los puestos laborales, por el orgullo de cumplir con la fecha de su contrato. Novela con connotaciones autobiográficas, la recomiendo ampliamente, es corta y fácil de leer, además de tener un estilo particular con sarcasmo, ironía y cinismo que la hacen exquisita y original.

Fácil de leer, es u interesante la forma en que plantea la sociedad Japonesa en el mundo laboral. Me gustó pero no me volvió loca ni me atrapó tanto, pero seguiré leyendo a la autora de todas maneras.

Amélie Nothomb no deja de sorprenderme, su realismo y crudeza se hacen patentes en esta novela corta que describe un camino de humillación. Oriente y Occidente se enfrentan en un choque de culturas detallada a través de la experiencia laboral de la protagonista que es un camino de martirio, en una empresa japonesa, casi metáfora del cielo y el infierno. Una cultura exigente en general, y con la mujer en particular, que considera al suicidio un derecho a recuperar el honor. Esa es una opción. Otra es asumir el sistema reconociendose esclavo y actuar como se debe frente al emperador, con estupor y temblores sólo así, tal vez, haya esperanza de superación y aprendizaje. ¡¡Muy, muy, muuuuy buena!!