EL PROYECTO JOSHUA

Jamás pensé entender a un pederasta, hasta que conocí el personaje de Cosmo. Secundario en la historia principal, pero que aborda un tema muy delicado desde un punto de vista que nunca razoné. Habla de la influencia que el pasado y los traumas pueden tener en nosotros, y cómo dos personas que han pasado por circunstancias similares pueden tomar caminos radicalmente opuestos. En conclusión es un libro muy violento pero también muy crítico y reflexivo, ya que toca los temas de pederastía, maltrato infantil, familias de acogida, y predective policing. No apta para personas fácilmente impresionables, pero recomendadísima para los amantes de la novela negra y el mundo del crimen.

Fitsek no solo es el mejor escritor de suspense, sino que en cada libro plantea una temática social grave, oscura o difícil de tratar que invita a una profunda reflexión; uno no queda indiferente ante ello, te atrapa tanto el relato como el trasfondo. La historia es excelente, logra tal empatía por momentos que uno llega a sentir la desesperación en carne propia. El trabajo de investigación del autor para armar sus historias es impecable, como siempre. Totalmente recomendable

Me encantó! Plot twist en los 83 capítulos! Mantiene un alto nivel de tensión en cada uno de los capítulos! Un thriller psicológico impecable! Te mantiene enganchado de principio a fin, altamente recomendable.

Todo libro de Sebastian Fitzek es simplemente una obra maestra.

TODOS LOS LIBROS SON BUENOS...LO DIFICIL ES ENCONTRAR EL MOMENTO. Partiendo de esa premisa el Proyecto Joshua es un libro para leer de vacaciones. Desde que abres la tapa y comienzas a leerlo te engancha. Tiene un ritmo acelerado y capítulos cortos con giros permanentes lo que impide el aburrimiento del lector. Eso sí, NO ESPERES PROFUNDIDAD!!! No estamos reseñando literatura de culto que te haga reflexionar sobre la existencia o termines en medio de una depresión en tus vacaciones (sí, aún no superé "Nunca me abandones" de Ishiguro). Es una obra para divertirte, pasar el tiempo para lo cual CUMPLE SU FUNCIÓN al 100%. TIP SECRETO: IDEAL PARA LA PLAYA!!!! Viene excelente para leer mientras tus hijos hacen pozos en la arena, tu pareja toma sol y tomas algo (acá en argentina seguramente sea mate). Sebastian Fitzek es un autor alemán galardonado por sus novelas de suspenso, siendo esta obra lo primero que leo de él me ha dejado intrigado para adentrarme en su mundo (futuro fan de Fitzek? no lo sabemos). SI SUFRIS BLOQUEO DE LECTOR, este libro te desbloquea. 8/10

Un libro que te genera intriga y ganas de leer más y más con cada capítulo. Muy interesante la forma en que aborda a los personajes, y sobre todo los diferentes rumbos que tomaron Max y Cosmo a pesar de haber tenido una infancia con vivencias en conjunto.

Soy una fanática declarada de Fitzek, mis expectativas eran altas y tengo que decir LEAN ESTE LIBRO. Comienza con un extracto de Escuela de sangre, un thriller escrito por el escritor Max Rhode, quien interpreta al personaje principal en esta historia. Dato curioso: La escuela de sangre también se publicó en forma de libro real unos días antes de la publicación del El proyecto Joshua, por supuesto, también escrito por Fitzek. Pero no se preocupe, La escuela de sangre es un libro independiente, no tiene que leerlo de antemano. A su antigua manera, Fitzek vuelve a la mitad de la acción, comenzando con la de Max Rhode, un padre y escritor, cuya vida se enreda cada vez más con cada página y finalmente se vuelve contra sí mismo. Diálogos de lectura rápida, capítulos cortos y nítidos, escenas siempre duras y violentas que se asemejan a una película de acción envuelven al lector como solo Fitzek sabe hacerlo. En general, noté que mis expectativas aún se comparaban con Noah, porque para mí ese fue el mejor libro de Fitzek. El pasajero 23 tampoco pudo superarlo.