VEINTICUATRO HORAS EN LA VIDA DE UNA MUJER

En este libro cortísimo, tan corto es posible sentirlo todo. Sentí la humillación palpitante, el amor divino y la pasión maligna por las apuestas. Nos adentran a los abismos suicidas y las experiencias insólitas de una vida, todo en veinticuatro horas. Veinticuatro horas que son capaces de trasmutar los seres y los sentimientos para que ya nunca regresen a ser los mismos. La manera en que fue narrada es magnífica, expresiva, plástica. La historia gira, se descarrila y regresa, cambia y continua. Me gusto, y me gusta más porque me hizo sentir la indignación que pocos libros te hacen sentir. Es distinto, intenso, efímero y extremadamente fugaz .

Cuando Zweig narra, el relato vibra en un armónico similar al hechizo. Se siente la zozobra de una travesía lírica donde la corriente arrastra a sus personajes hacia las cadenas de una adicción febril, que los consume y les arrebata su esencia y honor. Al llegar a las cien páginas del relato será demasiado tarde, tu también estarás en ese mismo barco… pidiendo más.

Es asombrosa la facilidad del autor en describir las pasiones de sus personajes. Siempre acabas atrapado por un irresistible mimetismo hacia ellos que te absorbe, enreda y enmaraña irremisiblemente. Una historia en apariencia vulgar y trivial se va convirtiendo, con admirable maestría, en una narración de trascendencia insospechada. Mientras lees sientes las ideas bullir intranquilas en tu mente, como si fuesen espoleadas, excitadas y aquellos conceptos morales adormecidos, apiñados con sólida convicción, de repente, se ponen en marcha para ser cuestionados o reafirmados. Novela corta, pero no por ello menos intensa, debió convulsionar los apacibles e hipócritas principios de hace casi un siglo. Cada lectura de sus obras reafirma el placer de leer a Stefan Zweig.

Bueno. Primer libro que leo de Zweig, compre otros probablemente más relevantes pero comencé con este por parecer de fácil lectura. Aunque los valores puestos en juego puedan parecer un poco anticuados, el fondo de la cuestión es aún actual, que puede llegar a hacer una mujer en veinticuatro horas por un completo extraño? Cuantos de nosotros nos creemos correctos, honorables, honrados y sin embargo tal vez dejaríamos todo de lado de un momento a otro por un rapto de pasión? Es corto, se lee fácil, no me parece fundamental, pero tampoco carece de valor.

Lo leí rápidamente, una novela corta, todo un clásico. Creo que quedan pocos amantes de la lectura que no lo hayan devorado. Yo lo hice hace bastante tiempo pero lo voy a recordar en esta reseña. Escrita en 1927 por Stefan Zweig, el gran escritor austríaco, que nos ha dejado una importantísima producción literaria de una genial maestría. Entre todos sus escritos, esta magnífica narración corta, muy emotiva y conmovedora, en la que se interna en el alma femenina. Describe la situación de una mujer durante un solo día de su vida, un día decisivo y maravilloso y a la vez, también con un final terrible. Un viuda inglesa se enamora, por azar, una noche en Monte Carlo, de un diplomático polaco. Narrada en primera persona por un residente anónimo de un hotel de la Riviera, cerca de Mónaco, donde se encuentra un grupo de la burguesía de diferentes países europeos, que se ha convertido en el confidente del momento más impactante y clave en la vida de la mujer, Mrs. C. la protagonista, ya anciana. Ella le cuenta lo ocurrido, hace ya mucho tiempo, ya que lo cree capaz de no juzgar su comportamiento. Así es como conocemos esas veinticuatro horas en la vida de una mujer, que altera su cotidianidad por el atractivo jugador polaco. Nos ponemos en la piel de un joven adicto al juego y vemos como la señora Mrs. C. tratará de ayudarlo, mientras se va enamorando poco a poco, a pesar de que él sigue enfrascado en el juego. Un reflejo fiel de la moral dominante y los prejuicios de la época, las apariencias y las convenciones sociales que castiga y marca a la mujer que se atreve a incumplirlas. Una historia muy bien estructurada, admirable la capacidad para retratar la psicología de los personajes, así como la descripción de las pasiones arrolladoras e inesperadas, que inundan a la protagonista. Un gran placer leer a Zweig, y en esta novela descubrimos su universo literario, intenso, seductor y delicioso. Nunca nos equivocamos si leemos a Zweig.

Stefan Zweig es uno de mis autores preferidos y la razón es su capacidad de, en tan pocas líneas, armar un universo completo. Esta novela es otro ejemplo, donde nos invita a reflexionar sobre la terrible carga cultural que aplasta a las mujeres dejándola atrapada entre la culpa y desesperación de dejar pasar la vida sin vivir realmente, según el ideal romántico. Y creo que genera un cuestionamiento a los prejuicios y el deber ser de las mujeres que tiene algunos puntos que aún prevalecen hoy.

¡Precioso! la historia, el estilo, cada palabra, una belleza literaria. Después de leer libros “perturbadores” es un bálsamo leer algo tan hermoso. Una historia sencilla y a la vez profunda. Impecable.

Zweig sabe como meterse como nadie en el alma de una mujer, en este caso en el de una viuda de cuarenta años que se deja arrastrar por la pasión, la vida no puede aquietarse y termina por romper buscando vida, aunque se haga sin medir la consecuencias del acto. Una ruleta rusa que no es más que la contraposición a otro juego, el de un ludópata. Una enfermedad que describe casi tan magistralmente como Dostoievski. Al final esta corta novela es el complemento perfecto, el cierre de escritura magistral que inició el ruso con "El jugador" al tema y el broche lo pone Zweig.