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Sinopsis de UNA SUERTE PEQUEÑA

Un poderoso thriller familiar, donde la realidad y la intimidad tejen una cerrada urdimbre. Después de veinte años una mujer vuelve a Argentina, de donde partió escapando de una desgracia. Pero la que regresa es otra: no luce igual, su voz es diferente. Ni siquiera lleva el mismo nombre. ¿La reconocerán quienes la conocieron entonces? ¿La reconocerá él? Mary Lohan, Marilé Lauría o María Elena Pujol -la que es, la que fue, la que había sido alguna vez- vuelve al suburbio de Buenos Aires donde formó una familia y vivió hasta que decidió huir. Aún no termina de entender por qué aceptó regresar al pasado que se había propuesto olvidar para siempre. Pero a medida que lo comprenda, entre encuentros esperados y revelaciones inesperadas, entenderá también que a veces la vida no es ni destino ni casualidad: tal vez su regreso no sea otra cosa que una suerte pequeña.

60 reseñas sobre el libro UNA SUERTE PEQUEÑA

«Quizá la felicidad sea eso, un instante donde estar, un momento cualquiera en el que las palabras sobran porque se necesitarían demasiadas para poder contarlo [...]. La felicidad como una imagen para contemplar su silencio». * “Una suerte pequeña”, de Claudia Piñeiro, evoca en primera persona, y entre diálogos, el fluir del pensamiento de una mujer que regresa a su ciudad natal, Buenos Aires, donde reflexiona sobre temas como la maternidad, la infancia, el amor o la soledad. Una mujer cuya vida cambia de suerte gracias a la amabilidad de los extraños. Y con la pluma amable de la autora quedan sus palabras resonando una vez que el libro se ha cerrado. ¿Que si la recomiendo? Sí.


Ame esta historia. De lo mejor de la autora. El desafío es seguir el devenir de la vida de MARILÉ/Mary sin juzgarla. Me hace pensar en que la vida nos enfrenta con situaciones dolorosas y difíciles, que estamos preparados para muy poco de lo que nos pasa, que hay daños irreparables, que no siempre el amor alcanza. Me conmovió íntimamente. 🖤


Una breve novela contemporánea que tiene como eje un hecho ocurrido 20 años atrás y cuya introducción a la trama me pareció larga y vueltera, aunque, avanzada la lectura y estando en conocimiento del perfil psicológico de la protagonista, se entienden esas disquisiciones iniciales. La maternidad y cómo se gestionan la culpa y el duelo, son los temas sobresalientes de esta dramática historia que nos invita a reflexionar sobre qué hacemos con los que nos pasa, cuando lo que nos pasa es irremediable.


Relato muy bien estruturado en primera persona por la protagonista, mujer dañada por una circunstancia terrible, que debe enfrentar sus propias angustias . No falla la Claudia Piñeiro en escarbar en las preguntas y dudas de quien debe asumir sus responsabilidades y/o culpas.


María Elena Pujol, una madre argentina, vive un suceso que cambiará su vida. La propia situación y los efectos sociales posteriores que provocará, conseguirán que le invada la culpa y la tristeza. Es una narración en primera persona que nace desde lo más profundo de su ser por y para su hijo. El relato destila una crudeza de gran profundidad e intimidad. Parece complicado que la autora no haya volcado en la novela una parte importante de sí misma; desde luego si no es así es loable cómo con su delicada prosa consigue hacernos sentir la más descarnada tristeza y desesperación de la protagonista. Un relato muy intenso y emotivo; se podría decir que en algunos instantes cuesta volver a la lectura a sabiendas de las sensaciones oscuras que provoca su lectura. Una autora argentina que merece la pena conocer.


Muy buen libro , emotivo , con suspenso y una historia de vida que da cuenta de las segundas oportunidades . Corto y de ágil lectura


Es una novela tan dolorosa como conmovedora. Corta a la vez que profunda. Primera vez que leo a esta escritora y ya quiero volver a leerla. Describe muy bien esa clase media alta, medio pelo, que vive de apariencias, que juzga antes de compadecer y excluye antes de comprender. Dar detalle de la trama implica spoilear un relato que va presentando de manera gradual un conflicto desgarrador que invita a pensar y preguntarse: ¿qué hubiera hecho yo? Mary/Marilé/María Elena es una mujer común cuya vida transcurría normal hasta un día y un momento crucial. Veinte años después vuelve con todo el temor y dolor acumulados. Sorprende, conmueve, exige reflexión y la capacidad de ponerse en el lugar del otro, no sólo de la protagonista, sino de personajes que la afectan y toman múltiples decisiones. Muy bien escrita, con personajes sumamente interesantes y un contexto que nos es totalmente familiar. Propone suspenso, drama, compasión y superación. ¡Excelente!


Honestamente, agarre este libro sin mucha expectativa y con algo de prejuicio. Como casi siempre estaba equivocado. Historia muy dinámica, un poco adictiva. Desgarradora a su manera. Me gustó mucho.


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FRASES DEL LIBRO UNA SUERTE PEQUEÑA

hay ciertos acontecimientos que están destinados a suceder, no hay escapatoria, no hay circunstancias que pudieran haberlos evitado. Aunque uno tome un atajo, o se desvíe del camino o incluso se detenga.


Publicado porMaribel Calle

Quizá la felicidad sea eso, un instante donde estar, un momento cualquiera en el que las palabras sobran porque se necesitarían demasiadas para poder contarlo. Atreverse a tomarlo en su condensación, sin permitir que ellas, en su afán de narrarlo, le hagan perder su intensidad.


Publicado porMaribel Calle

Hay madres que tienen suerte y la vida no las somete a este tipo de pruebas.Yo sólo tengo una suerte pequeña.


Publicado porMaribel Calle

¿Cuánto daño puede ocasionar un dolor que existe pero que no tenemos permitido no sólo mostrar sino sentir?Todo el daño. Un dolor silencioso, clandestino, que lastima más que el que puede llorarse abiertamente.


Publicado porMaribel Calle

Tal vez de esto se trate la felicidad: de ver caminar a mi hijo abrazado a su mujer, unos metros delante, mientras cargo a mi nieta, que me roza el pecho con su mano.


Publicado pormariabv2012

Porque el dolor sólo se puede contar así. El dolor, el desgarro, la huida, el partirse en mil pedazos que nunca volverán a unirse, la mirada lejana, el abandono, el abandonarse, las cicatrices, sólo se pueden narrar en primera persona.


Publicado pormariabv2012