EL PRINCIPE FELIZ

Presenta una cruda caricatura de la vida en Inglaterra a fines del siglo XIX, donde las diferencias sociales eran muy marcadas: la nobleza vivía en sus palacios rodeados de lujo  y riquezas mientras  el pueblo sufría hambre y frío. Esta es la relación  que existe entre la Revolución Industrial y "El príncipe feliz": Wilde muestra con crudeza la marginación y la injusticia social en que está sumido el pueblo trabajador (proletariado), recordemos que la industrialización se originó en Inglaterra (donde vivió Wilde la mayor parte de su vida) y luego se extendió por toda Europa. Wilde en toda su obra fue un gran crítico de la sociedad en que vivió, en particular de la aristocracia, de su hipocresía y de las grandes diferencias sociales. Es un relato muy triste, pero que –como todo cuento maravilloso- tiene un final feliz. La leí y la miré por tv.Me emocionó más el libro.👌

En esta historia Wilde nos hace reflexionar acerca de los prejuicios. Y tambien de lo que las personas podemos hacer para cambiar esto. Como el príncipe que está dispuesto a ayudar a los que lo nesecitan. Se abordan las injusticias de una sociedad desigual. Habla de la lealtad y bondad. Demuestra que lo que importa no es lo material, lo que importa es lo que llevamos adentro. Sin dudas es una de las mejores historias que leí. Muy emocionante...

De pequeña me encantaba este libro, pese al hecho de que me causaba cierta tristeza, pero aún así lo leía y releía una y otra vez.

No podría ser objetiva con este libro, lo leí cuando tenía 5 años y gracias a Oscar Wilde inicié un trasegar por la lectura. Tengo una relación emocional con este libro!

Uno de mis cuentos favoritos, lo he leído hasta prácticamente sabérmelo de carrerilla. ¡Y sigo llorando cada vez!!!!. Maravilloso y único.

Me gusto el cuento 😃 es tan bonito

Este cuento tiene detalles que me han recordado poderosamente al estilo de Charles Dickens, como ese concejal al principio de la historia que delante de sus colegas prioriza lo práctico por encima de lo bello (los que hayan leído Tiempos difíciles, de Dickens, esto les recodará vagamente a los "hechos" del profesor Gradgrin), o como ese profesor al que le parecía mal que los niños soñaran cuando estos comparaban la estatua del Príncipe Feliz con un ángel, porque los niños soñaban con ángeles. Aparte de esto, creo que Wilde vuelca con este relato toda su crítica hacia los críticos literarios (nunca mejor dicho) que solo veían la forma pero nunca el fondo, al igual que el alcalde nunca pudo apreciar el fondo del Príncipe Feliz al ver en él una estatua gris y descolorida. Es una historia dirigida sobre todo a aquellas personas que no pueden ver más allá de lo obvio, aquellos que solo ven una estatua y una golondrina a sus pies sin reparar en los sacrificios que ambos han hecho.

Definitivamente las letras de Óscar Wilde siempre me conquistaron, este cuento en particular me encantó. La amistad, los valores, la melancolía y las lecciones dentro de el, uff. Precisamente es eso lo que convierte a esta corta historia en una que te hace reflexionar de manera indirecta, las descripciones tan claras pero hermosas. Simplemente envolvente.