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Sinopsis de EL LIBRO DE LOS ABRAZOS
191 relatos breves que abarcan diversos temas, tales como política, religión, cultura, sociedad, Literatura, etc. Obra genial tanto por su originalidad como por su capacidad expresiva, impactante más si cabe por la sencillez con que está escrita. Los nadies: los hijos de nadie, los dueños de nada. Los nadies: los ningunos, los ninguneados, corriendo la liebre, muriendo la vida, jodidos, rejodidos: Que no son, aunque sean. Que no hablan idiomas, sino dialectos. Que no profesan religiones, sino supersticiones. Que no hacen arte, sino artesanía. Que no practican cultura, sino folklore. Que no son seres humanos, sino recursos humanos. Que no tienen cara, sino brazos. Que no tienen nombre, sino número. Que no figuran en la historia universal, sino en la crónica roja de la prensa local. Los nadies, que cuestan menos que la bala que los mata. Los Nadies. El libro de los abrazos.
32 reseñas sobre el libro EL LIBRO DE LOS ABRAZOS
Uno de los libros más hermosos de Galeano. Hasta el día de hoy recuerdo varios cuentos de este libro. Mi favorito: Los Nadies
Me encanta la forma como relata cada cuento de este libro, Galeano nos introduce de una manera increíble a una pequeña parte de su vida.
Relatos cargados de emoción y enseñanzas, el autor tiene la virtud de penetrar en el corazón
Galeano recolecta relatos como ninguno. Algunos son maravillosos, otros no se sabe muy bien qué rol juegan. Un libro simpático para tener y leer constantemente. Lo recomendaría también a adolescentes para que vean rasgos interesantes del mundo en el cual vivimos.
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FRASES DEL LIBRO EL LIBRO DE LOS ABRAZOS
... Julio se acercó, quizá dijo algo. El gemelo que vivía no dijo nada, ni se movió: estaba allí, pero no estaba. Sus ojos, que no pestañeaban, miraban sin ver, perdidos en alguna parte y en esa cara sin lagrimas estaba toda la guerra y estaba todo el dolor".
Nunca he matado a nadie, es verdad, pero ha sido por falta de coraje o de tiempo, y no por falta de ganas.(...) Y por si fuera poco, con premeditación y alevosía, he cometido el acto del amor sin el noble propósito de reproducir la mano de obra".
A los libros, ya no es necesario que los prohíba la policía: los prohíbe el precio.
En el río de la Plata, llamamos bobo al corazón. Y no porque se enamora; lo llamamos bobo por lo mucho que trabaja.
El peine desprendía sueños, con todos sus personajes: Los sueños salían del pelo y se iban al aire.
El amor se puede provocar, dejando caer un puñadito de polvo de quereme, como al descuido, en el café o en la sopa o en el trago.
