CONTRA EL VIENTO DEL NORTE

Finalizado: domingo 09 de julio del 2023 Puntuación: 4 / 5 Este libro es fascinante. Una vez que comencé a leerlo, ya no pude parar. Reí y suspiré muchísimo. Sentí mariposas en el estómago como hace mucho tiempo un libro no me hacía sentir. Recomendadísimo. Se lee de un tirón, el estilo de escritura es super amigable pero también muy profundo. Es un libro super refrescante que aprovecha al máximo los recursos del género epistolar para causar intriga, ansias e intimidad. Pero, por sobre todo, estimula muchísimo la imaginación. No hace falta que el autor te cuente todo con lujo de detalles; la correspondencia entre los protagonistas está tan bien escrita que te invita a imaginar y pensar y reflexionar y a participar activamente de la historia. El lector es quien toma la responsabilidad de llenar esos vacíos. Fue maravilloso. Sin embargo, no le doy la puntuación perfecta por las siguientes razones. Primero, el correo ABSOLUTAMENTE INNECESARIO que envío un personaje a uno de los protagonistas. No le aportó absolutamente NADA a la trama, solo drama innecesario digno de una teleserie cebollera y melodramática que necesita rellenar. Segundo, porque, a veces, los personajes eran muy cansinos y no podía con ellos. Está bien, lo entiendo, el amor es que te puede poner tantito bobo y bla bla bla, pero no necesariamente te convierte en un mocoso grosero, inmaduro y egoísta. Y así fue como muchas veces se comportaron los protagonistas y se me hizo irritante. Y tercero, el estilo de escritura del autor es precioso y me encantó, y claramente sentí que intentó dar un registro particular a cada personaje y transmitir la personalidad de estos a través de los correos electrónicos. Pero muchas veces me confundía sobre quién mandaba qué correo y debía devolverme o esperar al siguiente correo para saber quién mandó que cosa. Y eso se debe a que, muchas veces, el estilo y el registro de los personajes era muy parecido. E incluso, cuando el personaje manda el correo innecesario y cebollero, manifiesta que "no se le da bien escribir ni es bueno con las palabras" pero se manda un correo larguísimo y super profundo y reflexivo, con un registro muy sospechosamente parecido al de los protagonistas. Y no me lo terminé de creer. ¡RECOMENDADÍSIMO! Ansiosa por ver qué me espera en la segunda parte (es una bilogía).

No puedo creer que por fin esté aquí. No quiero estar aquí (no me lo tomen a mal, me encanta estar aquí, es mi drama post terminado un libro) pero quiero estar con Emmi y Leo en el mundo del internet, para ser más precisos, en una bandeja de entrada... si, así es, así es como se desarrolla esta novela. ¿Quién nunca se imaginó encontrándose en un ciber un chat abierto con una conversación de dos personas conociéndose y compartiendo un juego de seducción por texto? Tal vez sea la única chismosa en el mundo, pero siempre quise toparme con algo así y por fin lo he hecho en este libro. La frase que más dije mientras leía era: “¡SANTA MADRE!” Así que ya se darán una idea de lo bueno que se puso, pero si aún no se convencen, permítanme reseñarles esto lo mejor que pueda con minutos de haber terminado de leer menos de 200 páginas en 4 días. ¿Por qué tanto tiempo?, seguro se preguntarán. La respuesta: había momentos que tocaba fibras tan sensibles en mi que tenía que detenerme, hacer pausas, respirar y despejar la ola de emociones y después prepararme para seguir. La historia de Emmi y Leo comienza con una graciosa equivocación a una dada de baja suscripción de una revista llamada Like, pero los dedos, quizás torpes de Emmi se dirigirán a un Leike que cambiará el destino de su feliz vida en matrimonio con dos hijos. ¿O será mejor decir que una confusión que ha ocurrido antes con otros desconocidos llevará a Leo Leike a topar su vida con una mujer que no es para nada igual a las confusiones anteriores? Correo tras correo, nuestros protagonistas irán formando un vínculo extraño, dependiente, “hogareño”, una ilusión y deseo construido desde letras, párrafos y mucha imaginación. ¿En algún momento estos dos dejarán las pantallas para verse las caras? Anímate a adentrarte al juego de coqueteo textual, a emocionarte, a sorprenderte, confundirte y enojarte. Pero como dicen ¡Hey, las risas no faltaron!

Una peculiar mirada sobre las relaciones amorosas en la era del internet. En la vida diaria ¿hay lugar más seguro para los deseos secretos que el mundo virtual? En Contra el viendo del norte, Emmi Rothner envía por error un correo electrónico a Leo Leike y no se da cuenta de las consecuencias. Así, poco a poco, se entabla un diálogo en el que no hay marcha atrás. Parece solo una cuestión de tiempo que se conozcan en persona, pero la idea los altera tan profundamente que prefieren posponer el encuentro. ¿Sobrevivirían las emociones enviadas, recibidas y guardadas un encuentro «real»? En Cada siete olas (no digo más, sino es spoiler) Emmi y Leo nos enseñan que, después de que seis olas rompan en la orilla llega la séptima, y ésa trae siempre muchas sorpresas. El romance epistolar de un hombre y de una mujer que se ocultan detrás de su computadora, desarrollan una relación parcialmente protegida por un cierto anonimato y la impresión de dominar una parte de la libertad. Ambos quedan atrapados en el juego y tienden a descuidar cada vez más su complicada vida. Pero esa libertad relativa, así como su relación, les traerá problemas. Ambas trabajan con los límites entre la posibilidad del encuentro y la postergación del mismo; la posibilidad de la realidad y la inevitabilidad de la fantasía. Lo que más me llamo la atención de ambas novelas es su estructura. No es una estructura lineal típica de inicio, nudo y desenlace. Más bien, un conjunto caótico, pero a la vez ordenado, de e-mails que intentan contar una historia, aunque en la actualidad, con la inmersión que tenemos en las redes sociales y las app de mensajería, poco realista. La imagino (porque no se nos señala) situada en los ‘90. En tal sentido, siento que el autor se ha limitado a trasladar el género epistolar a nuestros días, sin plantearse jugar con las posibilidades que ofrece internet o con sus limitaciones. Sin embargo, creo que nunca había estado tan atrapada en el mundo de los correos electrónicos. Hay algo que atrae y que engancha. Es una lectura ágil y fresca. Con esta estructura, el autor permite la intriga por leer y el experimentar las mismas emociones que los personajes. Quizás su misma estructura incida en el desarrollo de los personajes porque siempre son develados en virtud de cómo el otro los concibe, percibe e interpreta. Las acciones de Emmi siempre son juzgadas desde lo que Leo deduce, y viceversa. La novelas epistolares permiten un abordaje que en este caso queda superficial. No obstante, como el lector sabe en todo momento exactamente lo mismo que saben los protagonistas de la historia, ni más ni menos información, vive la historia al mismo tiempo que la viven los personajes. Los emails son, en ambas entregas, bastante originales, con tonos cómicos, sentimentales, mordaces. Quizás me faltó al menos un email más para disfrutar con más detalle del desenlace de la última novela.

Este libro lo leí hace ya casi 6 años y me gustó bastante, sobre todo por su originalidad. A "Veroausten", que dice en su reseña que el final le rompió un poco el corazón, le digo que el autor nos presenta este final teniendo en mente la continuación de la historia en otro volumen. LucasM: indicas que lo encuentras bastante repetitivo y cansino; y yo te pregunto: ¿ no es cansina la comunicación por medio de correos electrónicos, comparándola con el diálogo en persona ? Yo leo todas vuestras reseñas y, por supuesto, respeto vuestras opiniones. ¡ Que aburrido sería que todos opinásemos igual ! ¿ No creéis? Gracias por vuestra atención y vuestras opiniones.

Quería leer algo del autor porque había visto muy buenas críticas y pensé que mejor que este libro que está compuesto de correos electrónicos, es cortito y así en veranito apetece más. Me ha gustado bastante, creo que es muy original el hecho de que toda la historia se desarrolle a base de correos electrónicos entre los dos personajes y también creo que es un gran logro saber desarrollar a ambos personajes y su historia en correos electrónicos, es algo que se ve poco en la literatura y me ha sorprendido gratamente. Quizás esperaba algo más, el final me dejó un sabor algo amargo, pero enseguida comencé su continuación Cada siete olas y me pude quitar ese sabor. Lo recomiendo.

Cómo puede expresar tanto enganche unos emails!? Maravilloso

El libro no me ha gustado demasiado. Considero que empieza muy bien, la historia me atrapó desde el primer momento. El problema surge más o menos a mitad del libro, dónde se vuelve muy repetitivo y cansino. Todo el desarrollo gira alrededor de los histeriqueos y las idas y vueltas de los personajes. Qué si se ven, que si no se ven; que si se escriben, que si no; que si continúan con la relación, que si cortan... y así todo el rato. Me costo mucho terminarlo, y eso es mucho decir considerando que es un libro corto y que esta escrito en mails, lo que debería resultar una lectura ágil y rápida. Al final la historia levanta un poco, terminando con un final inconcluso. Debo decir que me gustó mucho la escritura y el formato de narración tipo epistolar, pero a través de mails. Intentaré con la segunda parte para darle una nueva oportunidad a ver qué resulta...

Buenísimo, mantiene el interés desde la primera a la última página. Historia original y única. Muy del alma