BASADA EN HECHOS REALES

Nuevamente la autora hace uso de su biografía personal y familiar como argumento secundario y la relación de amistad con L el principal aparente que te conduce por un laberinto psicológico y en una lista de preguntas sobre la creación, y las relaciones humanas. "Basada en hechos reales" es un thriller psicológico que plantea además la incertidumbre del artista, en este caso, una escritora ante el vacío creativo, un estado de tal magnitud que puede llevar a una persona a la mayor vulnerabilidad, dependencia psicológica e incluso a la locura, como se plantea en este argumento.

Al principio el comienzo no me causó un gran interés, en realidad me pareció un poco pesado, sin embargo continué con las siguientes páginas y he de admitir que me causó una gran impresión y curiosidad L. Lo he sentido tan vivo, que incluso me introduje en él sin querer. Y, bueno, la puntuación... Es una opinión propia.

A Delphine de Vigan (Boulogne-Billancourt, Francia, 1 de marzo de 1966) la conocí a través de ese gran libro que es “Nada se opone a la noche”, este que es una suerte de “Misery” franco urbana no me sorprendió, ojo que no me pareció malo, pero tal vez esperaba otra cosa. En 2017 se estrenó “D'après une histoire vraie” (Basada en hechos reales), dirigida por Roman Polanski, con las actuaciones protagónicas de Emmanuelle Seigner y Eva Green, no la vi todavía, tal vez como el libro no me deslumbró, no interese por la película.

Delphine es una escritora que después de haber publicado su última novela, se encuentra bloqueada para seguir escribiendo. Es en esas circunstancias en que conoce a una enigmática mujer, L. Este personaje comienza a influir en su vida y en su escritura de manera tal que se va adueñado de ella. Un día, después de haber pasado momentos muy críticos juntas, desaparece de la misma manera en que había llegado. ¿Realidad o ficción? Una historia misteriosa que nos hace reflexionar sobre el trabajo del escritor, las relaciones tóxicas, el tema del doble y la manipulación. Me gustó mucho.

Para los que disfrutaron de Nada se opone a la noche. Es impecable y atrapante.

El suspenso psicológico es un género que disfruto mucho, Delphine de Vigan hizo toda una trama llena de misterio y situaciones algo perturbadoras, crear a un personaje tan imponente y agobiante como L. no es sencillo, el hilo de la historia parece claro desde el principio, sin embargo, son muchas las dudas que se van suscitando sobre la cordura de la protagonista y la veracidad de los hechos que narra la propia Delphine. Esta historia despierta una inquietud que va en ascenso y no es hasta el final que podemos obtener una conclusión de la trama. Descubrir a De Vigan ha sido muy afortunado para mí, en definitiva tengo que leer más de esta escritora.

Este es uno de esos libros que me ha costado muchísimo terminar. Para la mitad la narración se vuelve repetitiva, sin una ilación definida, más bien como una secuencia de divagaciones de la protagonista. Nunca llega a pasar nada verdaderamente importante que saque de la monotonía al personaje principal y al lector. El personaje de L es tedioso y termina repitiéndose constantemente., se vuelve casi transparente. En general se nota la carencia de creatividad de la escritora al no poder llevar la historia un paso más adelante.