AQUEL ÚLTIMO VERANO (CABANA #1)

Compré este libro animada por varias recomendaciones y lo comencé sin leer el argumento, algo que cada vez hago más y que me está funcionando bastante bien. Eso hizo que me sorprendiera descubrir algo que luego vi que venía en la sinopsis.  Susanna nos cuenta la historia de Álex y Priscila que para algo son los protagonistas del libro, pero en realidad también nos narra las aventuras de los hermanos Cabana, secundarios indispensables en esta historia. No en vano Alex y los Cabana eran vecinos de la misma urbanización y sus viviendas familiares están una enfrente de la otra.  Tenemos dos líneas temporales. La autora recurre a la tercera persona para el prólogo y  el pasado, y a la primera persona a dos voces para el presente. Me ha parecido muy acertado porque así somos testigos de los puntos de vista de ambos protagonistas. En el año 2006, Priscila regresa a Calpe para la boda de uno de sus hermanos. Cuatro años antes la muchacha había huido a Boston con el corazón roto, pero no se nos desvelan en un primer momento los motivos.  A Álex, el vecino de la casa de enfrente, no le sienta demasiado bien el regreso de la muchacha. El joven tiene sus propios motivos para estar resentido con Priscila y su marcha sin explicaciones.  La historia del pasado arranca en 1995 cuando Priscila tiene cinco años y un Álex de ocho se muda a la casa de enfrente. Poco a poco vamos conociendo a todos los personajes, vemos la unión que hay entre los Cabana y como ser la pequeña, y única chica, de cinco hermanos forja el carácter de Pris. Seremos testigos de cómo va surgiendo el amor, a lo largo de los años, entre los dos jóvenes.  Los capítulos del presente se van intercalando con los de veranos anteriores, lo que hace que la lectura sea muy ágil y adictiva.  A lo largo de las páginas vemos cómo la familia y la amistad es importante para los personajes y para el desarrollo de la trama. Es interesante ver la incomprensión de Priscila hacia el comportamiento de Álex y como este muestra su resentimiento. Eso da lugar a varias situaciones muy divertidas. Me han encantado ambos protagonistas, aunque Pris ande muy perdida en algunos momentos, y los secundarios son geniales. He disfrutado muchísimo de la lectura y me ha encantado la novela. Tardé en animarme porque los libros new adult no suelen convencerme, pero la historia de Álex y Priscila me atrapó de lleno.  Me alegro de haber hecho caso de la recomendación porque es un libro que merece la pena leer. La historia romántica es muy bonita y me gusta que tarde en desvelarse el misterio aunque se intuya lo que puede haber pasado. La narración de los veranos anteriores nos permite conocer a los personajes y ver cómo evolucionan y eso ayuda a tomarles cariño.  La alternancia de capítulos del presente y del pasado me ha encantado y es lo que creo que hace tan adictiva la novela.  Hay partes muy divertidas y me he reído mucho con algunas situaciones. La parte de la cuesta con Álex, Priscila y Jaime me encantó, pero no es la única situación divertida, ya que hay muchas a lo largo del libro.  Los secundarios son muy importantes en la novela, y es que el libro no sería lo mismo sin los hermanos Cabana y sus diferentes circunstancias.  Estoy deseando leer el resto de libros y ya tengo la historia del segundo hermano en el Kindle.

El enganche que he tenido con este libro ha sido brutal. En ningún momento me he visto aburrida, ni con ganas de dejar de lado la lectura, estos días he estado metida en la historia de una manera brutal desde las primeras páginas. Si es verdad que algunas cosas se saben, pero te engancha la manera de narrar de la autora, y también por supuesto esperando el momento de cuando se iba a saber todo, o cómo se iba a solucionar, si eso llegara a ocurrir. La lectura ha sido también muy amena gracias a la alternancia entre pasado y presente. En el pasado nos encontramos a los protagonistas desde pequeños hasta su adultez. Y en el presente nos topamos con una Priscila que huyó a América por algo que hizo Alex, abandonando todo, su vida, su relación y a su familia, volviendo después de 4 años para un reencuentro que no será como ella ni él se esperan. Recomiendo este libro muchísimo, una y otra vez lo haré, yo ya estoy enganchada a la familia Cabana y me muero por conocer las historias de los hermanos de Priscila, que ya tienen un parte de mi corazón ganada.

Me ha fastidiado, no tengo otra palabra para describirlo. Toda la situación me ha parecido de lo más absurda. Tenemos a Priscila y Alex que se conocen desde que eran niños y cuando son mayores tienen una relación y hasta se casan (no es spoiler lo dice la sinopsis) pero un verano pasa algo que los separa y cuatro años despues Priscila tiene que volver al pueblo en donde compartió toda su vida con Alex y lo más seguro es que se lo encuentre, todo bien hasta aquí. El libro está narrado en dos líneas de tiempo: cuando los protagonistas se conocen siendo niños y van creciendo y la actualidad cuando a Priscila le toca volver al pueblo donde se criaron pues ok para empezar en mi opinión nadie en su sano juicio tiene problemas con su esposo y decide simplemente irse POR 4 AÑOS sin hablar con esa persona sin pedir el divorcio ni nada y de paso obligar que tu familia ni mencione el nombre, cabe destacar que el tipo es vecino de su familia, los hermanos de Priscila son súper compinches de el y los padres de ambos hasta se visitan y son amigos ¿Como logró no saber nada de el en 4 años? No tengo ni idea y tampoco quiero averiguarlo, solo sé que me molestó de una manera nada normal porque a leguas se veia que todo pasaba por la falta de comunicación, puedo asegurar que si los protagonistas hubiesen hablado; en el tercer capítulo terminaba el libro, pero en fin a pesar de que tenia cosas lindas como el hecho de que la prota tenga una familia numerosa, sean unidos y todo transcurra en un lindo pueblecito no ha sido suficiente para engancharme.

Describe una historia de amor con personajes muy naturales con los que es fácil empatizar.

Esperaba más de este libro. Es un libro bien escrito, pero su trama me ha resultado predecible de principio a fin, ninguna sorpresa y esperaba cierto salseo. En referencia a los protagonistas, si este libro hubiera tratado de chavales de 16 años, quizá no me habría chocado tanto, pero esos comportamientos cuando se va camino de los 30, cuanto menos es preocupante. Especialmente el personaje de ella, de Priscila, me ha resultado inaguantable: infantil, incoherente y caprichoso... En definitiva, este libro no ha sido para mí, y ya lo siento, porque esperaba otra cosa.

Este libro es el primero de la serie Cabana, una serie de libros que está muy de moda por Bookstagram este verano, y no se merece menos… lo raro es como he tardado tanto en adentrarme a conocer las historias de los hermanos Cabana.En este libro aparte de conocer algunas aventuras de los hermanos, se centra más en la historia de Alex i Priscila, ella la hermana pequeña de los Cabana, él el vecino de al lado. Donde, por alguna razón cuando creíamos que la vida de los dos estaba en la cima de la montaña ocurre algo que hace que Priscila huya a Boston. Para saber el qué, tendrán que leer el libro. Una relación de enemies to lovers de las que nos gustan esperando el “clic” para deshacernos en las páginas.Me he reído mucho con todos los personajes, en especial con el de Jaime, el amigo y compañero de trabajo de Princila en Boston, ha dado mucho juego en la historia. Así que estoy deseando adentrarme un poco más leyéndome el segundo libro para saber más sobre las historias de todos los hermanos.

Me enamore de este libro. Bueno de los hermanos Cabana

Me ha sorprendido para bien, me ha enganchado nada más empezarlo, la familia Cabana es genial te sacan más de una sonrisa. Al ver el pasado como se van enamorando incluso desde tan pequeños es una gozada, hay paginas donde leyéndolas solo puedes sonreír. Lo único que me ha chirriado más es algunos de los comportamientos de la protagonista pero lo recomiendo muchísimo, no os va a decepcionar, deseando conocer las demás historias