Sinopsis de MEDIA GUERRA

5 reseñas sobre el libro MEDIA GUERRA

Broche de oro a una magnífica trilogía en la que como es costumbre en Joe Abercrombie no falta la sangre y la violencia, pero también la profunda humanidad de sus personajes, entre los que los buenos no siempre son ran buenos, aquí la condición humana sale al desnudo completamente para lo bueno y lo malo también, por cierto se acusa un poco a Abercrombie de ser un poco machista, yo no estoy de acuerdo, sus personajes más interesantes suelen ser mujeres.


Cierre de la Trilogía del Mar Quebrado con un muy buen sabor de boca. A pesar de que sigue en la línea de sus dos entregas anteriores, es el que más me ha gustado de los 3, quizás porque se centra bastante en el tema de las alianzas, estrategias de batalla y deja de lado los viajes y expediciones. De nuevo aparecen personajes nuevos que eclipsan a los protagonistas de los anteriores libros, si bien Yarvi siemore está presente, como hilo conductor de toda la historia. Me ha encantado el personaje de Skara, como va evolucionando pero sin dejar de sentir angustia y remordimientos por su posición y decisiones, siempre anteponiendo el bien mayor. Y por supuesto, la idea de que la historia es cíclica, que se repite como una rueda que no para de girar, en la que la mayoría de la gente sólo repite los errores del pasado, aunque inicialmente pretendieran cambiar el mundo. Muy buenas sensaciones con esta prinera obra de Abercrombie que leo, estoy deseando leer sus obras "más adultas".


Le doy un 4 pero a la trilogía en su conjunto. El segundo me gustó mucho más que el primero y que este último. Me encanta que en este tipo de libros haya intrigas y traiciones y, desde luego, no le faltan. La evolución del personaje de Yarvi es fundamental para la historia, a pesar de no ser mi personaje preferido, más bien es algo odioso, nada tiene que ver cómo empieza en los primeros capítulos de Medio Rey y a como termina en este último libro. He echado de menos más apariciones de Espina Bathu, creo que es el personaje estrella de esta trilogía.


Una parte de mi quiere que haya más, pero otra está satisfecha con el cierre perfecto. No sé ni cómo expresarlo. Es que es perfecto. Es el libro que más me ha gustado de los tres. El libro se centra esta vez en Skara, una princesa, en Raith, un guerrero, y en el pequeño Koll, que ya no es tan pequeño. Una de las cosas que me ha gustado del libro es como van cambiando los personajes con el pasar de las páginas; lo hacen de una forma gradual, ajustándose a sus nuevas realidades y tomando decisiones en consecuencia, que no lo notas hasta que lo comparas con el inicio. Skara era una princesa de Trovenlandia que huyo de su país cuando el ejército enemigo lo invadió, lo destruyó y asesino a las personas que ella más quería. Al principio está asustada y no sabe qué hacer, sólo es una chica que lo perdió todo, pero al final del libro se muestra como toda una reina, respetada, querida y alguien a quien no tomar a la liguera. Durante el libro se le ve tomar decisiones difíciles, decisiones que la atormentan, pero no se detiene por ello, afronta las consecuencias de sus actos y sigue adelante. Si buscas un personaje fuerte, es ella. No es que no tenga miedo, lo tiene, pero hace lo que debe. Raith es un asesino de Vansterlandia, un sanguinario, un guerrero. Al igual que Skara, él también va cambiando. Solía esperar la masacre con gusto, la anhelaba, pero cuando le mandan proteger a la princesa Skara, algo dentro de él comienza a ver las cosas distinto. Los fantasmas de su pasado lo acosan en sueños llenándolo de culpa y se da cuenta que no quiere sentirlo de nuevo. Comienza a cuestionarse su vida y las decisiones que toma. Koll toma un poco más de protagonismo en este libro. El chico inquieto de Medio Mundo es ahora el asustadizo aprendiz del padre Yarvi en el camino para convertirse en clérigo. Siempre preocupado por tomar la decisión correcta sin lastimar a nadie y tratando de complacer a todos, pero claro, no funciona y termina hiriendo a quien más quería. Durante el transcurso de la historia se le ve luchando con lo que debe hacer, lo que quiere hacer y lo que tiene que hacer. Si, estuve preocupado durante todo el libro por él porque me caía bien, parece ser de esos personajes que están ahí para causar daño cuando ya no lo estén. Yarvi, Espina y Brand aparecen de vez en cuando, pero la historia ya no se centra en ellos. El que más me ha sorprendido es Yarvi; pasó de ser un rey mediocre a esclavo y luego a astucioso clérigo, pero en este libro ha mostrado un lado diferente, puede que se haya intuido desde el libro anterior, pero nunca me lo imaginé de este modo. Me agradaba en los primeros dos libros, pero aquí le cogí una desconfianza tremenda y, no quiero decir odio, pero me ponía furioso xD Joe Abercrombie sabe cómo crear una historia, un mundo complejo y extenso y con unos personajes grandiosos y humanos. La historia nos sitúa en un bando durante la guerra. Al principio piensas que es el de los buenos, porque los protagonistas solían ser los buenos o porque fueron víctimas de la maldad, pero al avanzar la trama te das cuenta que no es así. En este libro no hay héroes ni villanos, solo personas persiguiendo sus intereses y luchando por lo que creen es lo correcto; personas que son lastimadas y actúan en consecuencia. Joe Abercrombie no nos sitúa en el bando de los buenos, porque los buenos cometen asesinatos y actos terribles al igual que los que se supone son los malos. Aquí solo hay personas. A pesar de todas las dudas que me quedaron al terminar el libro, hay una que destaca más que las demás. Durante toda la trilogía se menciona a los elfos, aquellos que iniciaron una guerra contra la Diosa y que terminó con ella destrozada y los elfos eliminados de la faz de la tierra… ¿Somos nosotros los elfos? ¿La historia se ubica cientos, o miles, de años en el futuro de nuestro mundo? ¿Es el resultado de una guerra nuclear? ¿Las reliquias élficas son metralletas y otras armas de fuego? ¿Estoy loco acaso?