LOS HABITANTES DEL BOSQUE

No hay reseñas, nada que ayude a navegantes temerarios que atreven su soledad lectora en las procelosas aguas del XIX tardío ingles. Adelante, no solo es un paseo apasionante por la naturaleza sentida por quien la ama tanto que los habitantes a veces, en sus desencuentros, parecen agredirla, interrumpir lo que realmente quiere contarnos. Son, además, los comienzos de la lucha por eludir la censura, darle voz a las mujeres, al sexo, al absurdo de las clases sociales. Tanto lo intentó y tanto le atacaron que, agotada su paciencia, y después de alguna novela más arriesgada, se dedicó solo a la poesía.

Es el primer libro de Thomas Hardy que leo y la verdad es que me esperaba más. Ambientado en la Inglaterra rural la trama gira en torno a los personajes que habitan la aldea de Little Hintock, en Wessex, especialmente en Grace Melbury, una joven que acaba de regresar a su casa tras completar sus estudios fuera de la aldea. A partir de este regreso parte de la historia se centra en las diferentes opciones que tiene el señor Melbury para encontrar un marido para su hija, pues a pesar que en el pasado su primera intención era casarla con Giles Winterbourne ahora tras el regreso de Grace mas culta y refinada ya no le parece el pretendiente adecuado para ella. Debido a esta situación los personajes se verán convertidos en víctimas de un sistema de clases en contra de sus voluntades. El ritmo lector transcurre despacio como me suele gustar en este tipo de lecturas pero aunque tiene una prosa maravillosa, la historia en sí la he encontrado muy simplona y predecible aún teniendo en cuenta la época en la que transcurre la historia. La protagonista me ha resultado insufrible y las descripciones del paisaje a pesar de estar muy bien definidas se me han hecho pesadas cuando una y otra vez se describen los mismos caminos por los que transcurren los personajes, muy repetitivo. Le doy 3 de 5 estrellas.

De Thomas Hardy ya había leído “ Lejos del mundanal ruido” que nos muestra la vida rural inglesa a finales del XIX como escenario de una trama amorosa y del esfuerzo de la protagonista de hacerse un lugar en una sociedad extremadamente patriarcal. En “Los habitantes del bosque”, de nuevo Hardy nos lleva a la campiña con una historia amorosa como trama principal, pero con una cáustica crítica a la sociedad de clases y a los prejuicios y futilidades que conlleva. Me llama también la atención la implícita moralina acerca de la mujer infiel con final trágico que también plasmaran autores como Flaubert en “Madame Bovary” o Tolstói en “Ana Karenina” además de en los libretos de las grandes óperas del siglo XIX. En cualquier caso, leer a Hardy es siempre un grato placer por su dominio de la escritura, del argumento y de sus personajes.