Howard Philips Lovecraft (1890-1937) nació en Providence y su vida transcurrió en el seno de una rancia familia de Nueva Inglaterra. El refugio en sus mundos oníricos lo salvó de una infancia demasiado agobiante, un sudario que momificaba su cuerpo. Para Lovecraft, el mundo era algo ajeno contra lo que había que defenderse y, por eso, era necesario ser conservador, y soñar con una nueva raza o ideal. Lovecraft fue un erudito de saberes prohibidos y libros malditos como el Necronomicón, en los que utiliza un lenguaje barroco y obsesivo que sugería un terror ajeno y, a la vez, fascinaba por esa familiaridad encarnada. En este volumen encontrará: - La llamada de Cthulhu - El ser en el umbral.
Nunca había leído nada de Lovecraft. Me he aventurado hoy con Cthulhu y la verdad es que ha sido genial.
En este libro se incluye también el relato de "El ser en el umbral" que me gustó más incluso que el relato que le da el nombre al libro, sin duda fascinante historia, terror que erizan la piel y con un desenlace totalmente inesperado, muy recomendado.
No está muerto lo que puede yacer eternamente,y con los eones venideros aun la muerte puede morir.
Se quedaron espantados ante la cósmica majestad de esta rezumante Babilonia de demonios primigenios y debieron haber intuido, sin ayuda externa, que no era nada que procediera ni de éste ni de ningún planeta cuerdo.
"No hay en el mundo fortuna mayor, creo, que la incapacidad de la mente humana para relacionar entre sí todo lo que hay en ella. Vivimos en una isla de plácida ignorancia, rodeados por los negros mares de lo infinito, y no es nuestro destino emprender largos viajes".
"No está muerto quien uede yacer eternamente, y en épocas extrañas hasta la muerte puede morir"
"La prudencia es preocupación primordial de aquellos que se enfrentan a menudo a la charlatanería y a la mpostura"