HOY ES SIEMPRE TODAVÍA

Alejandro Gaviria es persona que cumplió dos requisitos poco probables al tiempo en la vida, tener cáncer y ser ministro de salud de 🇨🇴 en ejercicio No sé porque este libro está catalogado como de auto ayuda, es más bien un ensayo biográfico, un ejercicio personal, académico y profesional. Alejandro Gaviria relata su experiencia en su lucha exitosa contra el cáncer, evidenciando sus emociones y luchas internas, sus análisis a raíz de su estudio de la enfermedad, y su crítica profesional habiendo ejercido el ministerio mientras padecía la enfermedad (de hecho hay fotos en internet donde luego de las quimioterapias está sin pelo, delgado, y con "el típico" gorrito tejido para protegerse la cabeza y hablando ante cámaras de su gestión) Muestra una visión menos dramática y más crítica frente a esta enfermedad, la legislación, y sistema de salud.

Es el relato autobiográfico de Alejandro Gaviria, Ministro de Salud y Protección Social del gobierno de Juan Manuel Santos, quien durante el ejercicio de su cargo tuvo que enfrentarse a un agresivo cáncer, lo que supuso una profunda transformación personal. | Noviembre de 2018.

Ser ministro de salud y enfrentar un cancer, ironías de la vida, sin embargo es un libro que nos hace reflexionar sobre lo efímero que es la vida y el valor que muchas veces no le damos por estar inmerso en el diario vivir…… Alejandro Gaviria es un escritor que me encanta por su forma de contar las historias , por su nivel intelectual y por qué siempre tiene algo nuevo que decir …. Me quedo con la frase: “Lo bueno de la vida es complicarla”

Este libro es un testimonio del amor, la gratitud y el asombro de estar vivo. Da cuenta de la transformación física y emocional que tuvo Alejandro Gaviria tras enfrentar un cancer feroz que le diagnosticaron en junio de 2017, en pleno ejercicio de su labor como ministro de Salud y Protección social. En ocho capitulos relata la odisea de su tratamiento y recuperación; reflexiona sobre lo que vivió y cómo lo afianzó aún más en su escepticismo religioso, descubre vasos comunicantes entre su enfermedad y algunos de los temas mas complejos que han pasado por su despacho, y comparte una antología personal de lecturas, libros y poemas, que fueron verdaderas medicinas para lidiar con el dolor y el miedo durante los momentos de crisis.

Alejandro Gaviria es un trabajador incansable, un hombre responsable y honesto como pocos, a quien la vida lo había ubicado en ese grupo de personas que se creen invencibles, sobrenaturales... y de pronto se topó, como cualquier mortal, con una difícil enfermedad, que como él mismo dice en el libro, lo llevó a descubrir... Lo utópico es que, para el momento de su enfermedad, Alejandro era el Ministro de Salud y Protección Social, un sector con muchos problemas y más críticos y enemigos que cualquier otro, lo generó que algunas personas sintieran casi que un "alivio" porque el Ministro se enfermara, Su libro es un testimonio de cómo cambiaron sus percepciones y sus emociones, de cómo recibió críticas y palabras de aliento y de cómo él luchó y sobrevivió.

Una historia sencilla pero llena de reflexivo y emotivo contenido. Fascinante como una historia se puede contar desde diferentes roles, teniendo diferentes argumentos, posiciones y prioridades pero teniendo siempre como centro la vida. Un libro lleno de citas pertinentes y hermosas que enriquecen su lectura. Dejo uno de los párrafos que para mi resume el libro y ya que el libro trata de la vida, es también un muy buen resumen de la vida: “ la vida es sobre todo una sucesión de coincidencias. Con el tiempo, dije entonces, los éxitos y los fracasos se relativizan. En cincuenta años los más felices serán los más amados y los más dignos de amor. La fama y la fortuna cuentan por un rato, pero al final importan menos. Mucho menos. Sin amor, sin amar y sin ser amado, tal vez no vale la pena nuestro tránsito efímero por este planetica”.

Muy buen libro; escrito de manera sencilla pero con un enorme valor testimonial y varios aportes de vida, especialmente para quienes hemos vivido en nuestras familias las dificultades e intensidad del cáncer. Cuando me decidí a leerlo tuve dudas por mis creencias católicas y el escepticismo religioso de Alejandro Gaviria, sin embargo, me sorprendió la manera apropiada y respetuosa en que aborda el tema. Además, tengo que reconocer y agradecer que él en algún momento, sin estar enfermo aún, nos ayudo con un tema delicado de mi sobrinito que sufría leucemia y tuve la oportunidad de agradecerle personalmente y sentir su calidez humana!

Cargada con bastante sentimiento, pero bastante enriquecedor en materia de coraje y valentía. Buenos poemas, libros y textos recomendados por el autor.