Desde que se inventó el violín, al final de la Edad Media, se le tildó de instrumento del Diablo. Estaba asociado a una música popular y lejana de la tradición cristiana y, además, se requería para tocarlo un brío y unos movimientos «espasmódicos» que, a los ojos supersticiosos, recordaban a los que podía realizar una persona endemoniada. Ni siquiera, cuando pasó a convertirse en pilar de la música clásica, pudo desprenderse del todo de esta mala fama. Debido a esto, a violinistas como Paganini, las malas lenguas les acusaron de poseídos o enviados de Lucifer.
Es un libre muy interesante eh igual que muy entretenido, que desde el principio te atrapa en la trama. Para empezar es una lectura que no es difícil de comprender ya que los personajes se identifican de manera muy clara & es que las escenas están descritas de una manera increíble. Hace referencias a personajes & eventos de músicos que fueron conocidos en tiempos pasados. En conclusión, es un libro muy bueno & muy entretenido que si quieres leer o empiezas con el hábito de leer, lo recomiendo demasiado ya que no es para aburrido.