Volumen compuesto por 13 aventuras, cuatro de las cuales se encuentran, según Doyle, entre las diez mejores del genial detective. Una característica de estas nuevas historias es su mayor teatralidad.
Nada, señor Holmes, excepto que me quedé tan perpleja que sentí que no quedaría satisfecha hasta haberle visto a usted y recibido sus consejos.
El rostro que nos observaba era tremendamente viril, pero de expresión siniestra. Con la frente de un filósofo por arriba, pero la mandíbula de un depravado por abajo
Algunos árboles, Watson, crecen derechos hasta cierta altura, pero después desarrollan cualquier extraña deformidad.
“Le ha faltado el don supremo del artista, el de saber cuándo hay que pararse. Quiso mejorar lo que ya era perfecto (…) y lo echó todo a perder”.