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Sinopsis de DICCIONARIO DE NOMBRES PROPIOS
Después de arrasar en medio mundo con Estupor y temblores, Amélie Nothomb hace lo que sólo está al alcance de una gran escritora: no repetir la fórmula del éxito sino dar una vuelta de tuerca a sus obsesiones de siempre, cambiando al mismo tiempo de registro, esta vez en una especie de bellísimo y sangriento cuento de hadas. La seducción y el asesinato, la belleza como peligro mortal, el talento individual como parte maldita, para decirlo con palabras de Bataille, son las constantes en la obra de Nothomb desde su sorprendente primera novela, Higiene del asesino (1992); a partir de entonces no ha dejado de tener un lugar central en la literatura actual escrita en Europa. Sin abandonar esas obsesiones, profundizándolas incluso, este Diccionario de nombres propios muestra cómo se combinan en Nothomb dos capacidades sorprendentes hoy en día: la de inventar historias a una velocidad casi mayor a la que cualquier escritura pudiera seguir y la de tener un control completo de su materia, como si cada una de sus novelas fuera una pieza dentro del vasto mundo que su obra está destinada a representar, como una Comedia humana del siglo XXI; es decir: fragmentaria, femenina, sin mayores certezas que sus ambigüedades. Un mundo narrativo que, por otra parte, carece de parangón en la literatura del momento.
3 reseñas sobre el libro DICCIONARIO DE NOMBRES PROPIOS
El diccionario Robert arroja varios resultados en su consulta, en el apartado de nombres propios ; Plectrude, el nombre se arroga características propias, el santoral nos habla de una Reina Bávara de la linea Carolingia que tenia la gracia de causar desgracias, propias y ajenas, terminando encerrada en un convento, y cuya única obra piadosa fue crear conventos y que sus restos al rescatarse resultaron incorruptibles. Aqui Plectrude debe asociarse igual a gracia, que le otorga la capacidad de realizar sin esforzarse lo que no quiere y de esforzarse para no conseguir lo que quiere. Se asocia además con muerte, suicidio y otras cuantas desgracias. Desde su concepción, nacimiento, elección de nombre , seguida de ser criada por una madre que no es la suya, y conquistar a todos con una mirada “ de Bailarina” lo que la lleva a realizar giros, tanto dancisticos como en la historia. Historia de búsqueda, de intento de repetición de patrones de conducta, un giro más. Historia de pérdidas necesarias para encontrar lo que se deseaba, aunque no como se quisiera. Nacida para el arte despliega tanto sus buenas como malas artes, para culminar con un final inesperado, aunque no el planeado. Tal vez y sólo tal vez el deseado por Nothomb. Pero , al menos en la historia eso ya no lo sabremos...
El destino de la niña Plectrude, nacida en prisión de una madre de diecinueve años que asesinó a su marido semanas antes de dar a luz, será el de una lucha contra la compulsión a repetir el destino maldito de su madre. Criada con la familia de una tía, destaca enseguida por su belleza salvaje, por un don casi sobrenatural de seducción que hace caer a sus pies a cuanto ser se cruza a su paso. Con la excepción del chico que ella ama. Amelie Nothomb hasta ahora no me ha defraudado sus historias son únicas e irrepetibles, como su autora, la amas o las odias, yo formo parte del primer grupo. SE LAS RECOMIENDO.
Es el libro decimosexto de esta autora, de la que me confieso irreductible fan, y una vez más he disfrutado con su lectura. La arrolladora personalidad de Plectrude me ha fascinado hondamente.
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FRASES DEL LIBRO DICCIONARIO DE NOMBRES PROPIOS
A menudo había intentado leer, pero los libros se le caían de las manos. Sin duda cada ser tiene, en el universo de lo escrito, una obra que lo convertirá en lector, suponiendo que el destino favorezca su encuentro.
En aquel instante, supo con una certeza sólo al alcance de las niñas, que un día se transformaría en una de esas personas que transforman los sapos en nostálgicos, las brujas en abyectas y los príncipes en estupidos
Tenía la impresión de que se habían asomado demasiadas hadas sobre la cuna de la niña. Temía que aquello atrajera la furia divina
Plectrude pensó que abandonar la infancia también era eso. No alegrarse con la llegada de la Navidad
Sin duda, cada ser tiene en el universo de lo escrito, un libro que lo volverá lector. Suponiendo que el destino favorezca su encuentro
Sonrío, ¡ la he reencontrado! , Al parecer sigue estando igual de loca. ¡Esta vez no la dejaré escapar!
