VLAD

Tenía bastante tiempo con este libro pendiente, porque quería leer primero Dracula y por fin fue uno de mis libros leídos del año pasado. La historia trata sobre el Conde Vlad, que debido a la escasez de sangre en Europa decide trasladarse a la Ciudad de México, en donde la noticia de personas desaparecidas no es de tanta importancia para las autoridades (tristemente), para eso contrata al bufete de abogados donde trabaja Yves Navarro, les pide le consigan una mansión, esto ayudado por su esposa Asuncion que se dedica a los bienes raíces. En un comienzo pensé es igual a Dracula, al menos lleva el mismo estilo, pero llegado un momento se vuelve más tétrico, más oscuro, con un Dracula mas vulnerable y al final plufff me explotó la cabeza, no es que me gusten los finales abiertos, pero en este caso me sorprendió, tuve que escribirle a Maren para que me ayudara a entenderlo. Que bien escribe este hombre y es la primera vez que lo leo. Nos habla desde la inseguridad que se vive en México, hasta ver de lo que somos capaces de hacer por no salir de la rutina en la que nos consumimos día a día. Me encantó la forma con la que Fuentes tomo un gran clásico europeo y lo acercó a nuestras vidas y nuestras costumbres. Recomendado!

Cronotopo Anacrónico . Mi breve historia con Vlad , Carlos Fuentes uno de los más grandes escritores mexicanos, prolífico y versátil. Con grandes carencias no superadas. con gran superación de muchas ausencias . Pero indudablemente un referente de la literatura internacional, cumple con largueza su función social sustentada en el lenguaje y la imaginación. Año 2010, primera vez que acudo a la Feria Internacional del Libro , Guillermo del Toro y Xavier Velasco presentan la novela “ Vlad “ de Carlos Fuentes, mi admiración pasa a , casi, reverencia. Por los tres. La eterna fascinación, por el mito vampírico, por la inmortalidad, y el consecuente horror que despierta, la inhumana y cruel manera de conseguir la prolongación de la vida a costa de otras,Fuentes lo traslada a la Ciudad de México, donde sus más de veinte millones de habitantes, sumergidos en la hipnosis colectiva disfrazada de individualidad, acuciada por la supervivencia se vuelven un más que apetecible banquete para el Conde Vlad Radu, El traslado es casi completo, ( de la historia ) como las mansiones durante la colonización, de America, y rearmado a partir de la idiosincracia de Fuentes, representada en el uso coloquial y los regionalismos lingüísticos, aderezado con la impresionante cultura, del mismo, manifiesta en la inmensa cantidad de citas y referencias, que tan pronto saltan a la vista como requieren su búsqueda con lupa, sincretiza, mixtifica, pero mantiene la esencia convirtiendo a Jonathan Harker en Yves Navarro, insertando rondas infantiles y fragmentos poéticos en su idioma original, el inglés, suma a ello aunque de forma breve, la cotidianeidad de una ciudad social y económicamente polifónica. Retorna al origen manteniendo el estilo epistolar, tanto en la carta histórica que el jefe de Navarro , el licenciado Zurinaga, ubicuo en la política por largos años, entrega , y en el mismo cuerpo del relato, tomado de lo escrito por Navarro. Sumado a ello la conversión de una casa residencial en un castillo al uso gótico, y la recreación en el del ambiente Stockeriano . Adereza con el origen vampirico a partir de una niña y el bello pero contrahecho Bordo, asistente de Vlad, refuerza con Asunción, esposa de Navarro y hace coincidir la historia con la fecha religiosa y celebración santoral de la misma . Y otorga papel relevante a un fallecido hijo de la pareja. Es perturbador el acabar con un movimiento de nigromante, con valores , estructura famiiar, psicológica , social e incluso religiosa El final inesperado y angustiante

Está historia da miedo, la verdad, pero del de la vida cotidiana que te da insomnio, terror y ansiedad de perder lo que más amas o de encontrar que tu perfecta realidad es una farsa que se desmorona y que fuiste engañado. Que el poder es frágil y una simple niña, un socio, un amigo o un cliente pueden cambiarlo todo y demostrarte que al final, con todo y tú influencia, estás a sus pies. La incertidumbre de no tener más el control. No sé si le quiero encontrar tres pies al gato, si no sé leer entre líneas o si solo es Carlos Fuentes relatando un verdadero vampiro en la época dónde los del tipo melancólico abundaban.

Pensaba que esta iba a ser mi última reseña de 2020, pero... me he quedado con tanto desasosiego dentro que no puedo cerrar así este año tan raro, necesito algo que quite la desazón, quiero algo que me permita despedirme con buen rollo. Escrito en primera persona y en pasado, el libro tiene una prosa exquisita, de forma que da miedo sin necesidad de nada extraordinario, sólo con la trama en la que danzan unos pocos personajes, que no necesitan darse a conocer más de lo que lo hacen. A eso se le suman una ilustraciones que ayudaban a que mi cerebro quisiera más y más, pero mi corazón las rechazara. Soy fan de los vampiros, veo, leo, todo lo que pueda sobre ellos, y cuando creo saberlo todo, llega esto y me lo desmorona todo. Impresionante y muy recomendable.

El tema y el escritor se veían muy atractivos, incluso hasta la portada del libro, pero conforme fui avanzando ya no me la creí. Me da la impresión de que es un libro escrito a vapor, como si Don Carlos ya estuviese cansado o algo así (desde luego esto no cambia mi enorme admiración por él, lo considero uno de los mejores escritores mexicanos). Por cierto, la sinopsis que aquí nos ponen no esta del todo correcta.

Es cierto que comienza con cierta similitud a Drácula pero avanzada la lectura es VLAD de Carlos Fuentes. Dios... ese final!! Qué final. Feliz con mi lectura

Es una buena historia; corta, pero sustanciosa. Nuestro amigo Vlad cambia su lugar de pasto y llega a México, dónde durante su posesión del lugar enfrenta a nuestro protagonista a un dilema moral. La lectura es bastante cómoda y transcurre rápidamente. El final es de esos en los que puede o no puede ser; por mi parte y a riesgo de no estar completamente seguro, me inclino por la resolución de nuestra atenta y amable compañera @maren

Se puede decir que Vlad, es un Drácula mexicano. La historia es parecida al de Drácula original pero aquí transcurre en la ciudad de México. Es un libro corto y fácil de leer, pero en algunas partes me pareció un poco aburrido y con poco ritmo en el transcurrir de los hechos. A pesar de eso me ha gustado bastante, pero sin duda prefiero Drácula de Bram Stoker.