Sinopsis de MADRES E HIJOS

A los sesenta y ocho años, Theodor Kallifatides, exiliado en Suecia desde hace más de cuatro décadas, visita a su madre de noventa y dos, que sigue residiendo en Atenas. Ambos saben que puede ser uno de sus últimos encuentros. Durante la semana que pasan juntos, recuerdan lo que ha sido lo más importante en sus vidas con una presencia decisiva del padre, de quien Theodor está leyendo el recuento escrito que este le ha dejado de lo que ha sido su difícil existencia, desde sus orígenes como exiliado griego en Turquía, pasando por sus meses en una prisión de los nazis y su pasión por el oficio de maestro. Se desvelan así los orígenes de una familia que atraviesa el siglo xx. Pero el libro es sobre todo un maravilloso homenaje al amor de una madre, a la que Kallifatides sabe encarnar en estas páginas de forma inolvidable, a la vez que logra transmitir una verdad universal sobre la importancia de esa figura en nuestras vidas.

6 reseñas sobre el libro MADRES E HIJOS

Theodor Kallifatides, escritor exiliado en Suecia, regresa a Grecia para pasar unos días con su madre, que tiene 92 años. En esta visita rememora lo que ha sido fundamental en la vida de sus padres y en la suya propia. Evoca los aromas, el ambiente de su barrio ateniense, disfruta de la comida que le ofrece su madte; y se pregunta constantemente por qué se exilió él.


17/23 📚🇬🇷 Título: Madres e hijos Autor: Theodor Kallifatides Páginas: 176 Sinopsis: El autor de 68 años reside en Suecia 🇸🇪 y vuelve a Grecia a visitar a su madre de 92 .Ambos saben que puede ser uno de sus últimos encuentros. Durante la semana que pasan juntos, recuerdan lo que ha sido lo más importante en sus vidas con una presencia decisiva del padre, de quien Theodor está leyendo un escrito que este le ha dejado de lo que ha sido su difícil existencia, desde sus orígenes como exiliado griego en Turquía, pasando por sus meses en una prisión de los nazis y su pasión por el oficio de maestro. Opinión: Novela llena de emotividad y sensibilidad. Muy fácil de leer . Valoración: 9/10


De todos los géneros y subgéneros que hay en la literatura, me gustan los libros testimoniales (gente real a la que le sucenden cosas reales) y, dentro de éstos, los que tratan o relatan relaciones filiales. Siempre me resulta interesante conocer cómo se vinculan padres/madres con hijos/as y, según quien lo cuenta, cuánto de homenaje y cuánto de catarsis hay en esa historia de versión unilateral. En este libro que destila ternura, el autor rinde tributo a su madre con una prosa simple que transmite una devoción mutua y conmovedora. Recuerdos, anécdotas, viajes, olores y sabores pueblan estas páginas que se leen y se disfrutan.


Me ha encantado. De muy fácil lectura. Tierno, entrañable, emotivo..... El regreso del autor a su patria y a su madre trasluce el sentimiento de pertenencia a su lugar y familia de origen. Busca respuestas a cuestiones de la historia familiar que sólo su madre puede darle y siente que le queda poco tiempo para planteárselas , dada la avanzada edad de ella El regreso es un reencuentro consigo mismo, con su infancia y su juventud. Por eso díce: "lo pasado es lo único que tenemos" Termina el libro con esta frase: “Eso es lo que significa tener una madre. Siempre llevas dentro un principio”


"Por doquier en el mundo eres huésped, menos en casa de tu madre". "De nuevo me doy cuenta de que mi madre es mi verdadera patria. Si yo fuera una fruta, sería mi verdadero árbol. Si yo fuera un árbol, ella sería mi tierra. Si yo fuera la tierra, ella sería mi cielo". Madres e hijos, Theodor Kallifatides. Es una obra preciosa, que te deja con el alma encogida por la belleza de sus palabras pero, sobre todo, por el sentimiento que expresa... Narra la relación tan especial que tiene el autor, emigrado a Suecia, con su madre nonagenaria durante un corto viaje de regreso a su Atenas natal. Va salpicando el presente con un escrito de su padre contando su vida... Y hace un juego muy bonito porque define a su padre como un hombre que siempre ha pensado en el futuro y a su madre como una mujer que prefería volver a lo pasado y, sin embargo, en la novela intercambian esos papeles: el padre cuenta el pasado y la madre el presente. No me salen las palabras... Es tan grande el nudo que tengo dentro de mí... Es un tema que me toca mucho... Porque madres tenemos todos pero hay madres y madres... Y en la suya he visto a la mía... Porque es una palabra que tendríamos que escribir en mayúscula por el modo que tienen de dar sin esperar, por esa generosidad que las hace únicas, por ese eterno cuidado que te procuran, porque siempre están aunque muchas ya se hayan ido,... Y también he visto retazos de mi reflejo en su madre... Porque compartimos ese sentimiento de cuidado, de desvelo, de guía, de dar, de amar,... porque mis hijos son el centro de mi vida... Espero hacerlo bien con ellos...


Theodor Kallifatides consigue la magia de la evocación de tu propia vivencia. Un enorme monumento a la madre. Un cálido enfoque y una escritura amable que te hace releer párrafos simplemente por su belleza. ...De nuevo me doy cuenta de que mi madre es mi verdadera patria. Si yo fuera una fruta, ella sería mi árbol. Si yo fuera un árbol, ella sería la tierra. Si yo fuera la tierra, ella sería mi cielo. ... Sentía una profunda gratitud por tenerla frente a mí. La idea de que algún día no estaría me resultaba tan extraña, que recordé lo que pensaba de niño. Que el árbol sobrevive a su fruto. Pero si me iba yo primero, ella cómo lo iba a soportar? ... Ahí estábamos los tres. Mi hermano de setenta y cuatro años, yo de sesenta y ocho, y mamá de noventa y dos. La ciudad a nuestro alrededor tenía más de tres mil años. La vida no es un sueño. A veces es incluso más bella. ...


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FRASES DEL LIBRO MADRES E HIJOS

En el mundo de mi madre existían los lazos sentimentales y la preocupación, (...) lo inesperado, la vulnerabilidad y la necesidad de que finalmente todo fuera bien. Las lágrimas no eran lo contrario de las sonrisas (...) Mamá reía más cuando lloraba con el alma.


Publicado pornmolia

Mi madre es mi verdadera patria. Si yo fuera una fruta, ella sería mi árbol. Si yo fuera un árbol, ella sería la tierra. Si yo fuera la tierra, ella sería mi cielo".


Publicado porjulia1955

Si hay algo absolutamente auténtico en el interior del hombre, eso es su lengua, el primer mito".


Publicado porjulia1955

De nuevo me doy cuenta de que mi madre es mi verdadera patria. Si yo fuera una fruta, ella sería mi árbol.


Publicado pormirianVi

No sólo la tierra es redonda. Algunas veces también la vida lo es.


Publicado porAfrica Rubia

De entre todos los regalos de valor, el más valioso es el buen amigo.


Publicado porAfrica Rubia