El pensamiento judío alemán resplandece en la historia del siglo XX como una especie de siglo de oro de la cultura que continua proyectando su luz sobre nuestra época. Y, sin embargo, aparece hoy como un continente engullido por la historia. Preguntarse sobre esta paradoja y sobre el rtecorrido de la judeidad en el seno de la Mitteleuropa significa, en este caso, ir a los orígenes del desgarro que transformó a Alemania del país modelo de la emancipación en el lugar donde se concibió y se puso en práctica un proyecto de aniquilación sistemática de los judíos.