EL CONDE LUCANOR

Clásico español medieval, un libro de exemplas moralizantes, algunos cuentos y fábulas las he encontrado en otros autores previos a Don Juan, pero estos tienen su impronta castellana que personalmente me gusta mucho.

Mi libro de cabezera por excelencia... Son fábulas que el sabio consejero Patronio, relataba al Conde Lucanor, con el fin de que este tomara decisiones prudentes. Este es un libro muy especial para mí y se que una buena historia con una gran enseñanza no están demás en ninguna librería, ni en la mente de un lector.

Recopilación de cuentos que siguen el mismo patrón. El Conde Lucanor pide consejo a su ay o Patronio, éste le contesta con un cuento

Libro que antes hacían leer en los colegios, con historias independientes, cada una aplicable a una situación vital. Muy recomendable releerlo, siempre se encuentra una enseñanza

Compuesto por la figura literaria del exemplum, esta magna obra está orientada a la dirección de las almas, a la predicación de las virtudes y la proclamación del bien. Con los exemplum se trata de dar muestras concretas de hechos que ocurren cuando no se respetan los deberes morales que dicta la doctrina cristiana, para finalizar siempre con una especie de moraleja o sentencia moral.

Y qué hace una de las colecciones de relatos más importante de nuestra literatura, precursor e introductor del "renacimiento español" del siglo XIV, más de 100 años antes de la mamporrada de los reyes caóticos o católicos. ¿Qué hace, decía, en "contemporánea "?

Se trata de una obra redactada con intenciones didácticas, con una estructura muy trabajada y diseñada para tal fin educativo y para otorgar belleza a lo escrito. El Conde Lucanor le plantea problemas a su sabio consejero Patronio, y éste, tras analizar la situación, le propone un ejemplo para aprender de él. En las últimas partes del libro la estructura cambia y en lugar de ejemplos se enumeran una serie de proverbios. La obra se lee muy fácilmente, creo que incluso para personas no familiarizadas con textos medievales. Pero lo que resulta muy grato al principio luego cansa, no por pesado, si no por lo reiterativo de la estructura (pedir consejo, recibir consejo, pedir consejo, recibir consejo). Por tanto, considero que la calidad de esta obra es incuestionable. Más aún si tenemos en cuenta la labor de su autor por realizar una obra a la cual pudiera acercarse el público menos instruido.

1974