anuel Leguineche desgrana recuerdos, relatos, sensaciones y reflexiones de una belleza, intensidad y certeza solo comparables con la sinceridad con que fueron escritas. Un mosaico narrativo de difícil catalogación, que como un álbum visual recoge viajes, guerras, amigos, lecturas, política, sorpresas o sueños, pero también a Mandela, a Urtain o el cálido campo de Brihuega, donde pasó sus últimos años, experiencias que inspiran las inteligentes observaciones del autor y reflejan su pasión por el arte de vivir y por el arte de escribir.
"Se va a la biblioteca para olvidar la vida o comprenderla mejor" " El destino de muchos hombres y mujeres dependió de haber tenido o no una biblioteca al alcance de sus ojos y sus manos"
En la condición humana siempre entra en nómina alguien deseoso de proyectar sobre los demás sus mezquindades y miserias.