Secuela de El resplandor, una de las novelas de Stephen King más emblemáticas. Ahora Danny Torrance, aquel niño aterrorizado del Hotel Overlook, es un adulto alcohólico atormentado por los fantasmas de su infancia. Un día se siente atraído por una ciudad de New Hampshire, donde encontrará trabajo en una residencia de ancianos y donde se apuntará a las reuniones de Alcohólicos Anónimos. En ese lugar le llega la visión de Abra Stone, una niña que necesita su ayuda. La persigue una tribu de seres paranormales que vive del resplandor de los niños especiales. Parecen personas mayores y totalmente normales que viajan por el país en sus autocaravanas, pero su misión es capturar, torturar y consumir a estos niños. Se alimentan de ellos para vivir y el resplandor de Abra tiene tanta fuerza que les podría mantener vivos durante mucho tiempo. Danny sabe que sin su ayuda Abra nunca conseguiría escaparse de ellos; juntos emprenderán una lucha épica, una batalla sangrienta entre el Bien y el Mal, para intentar salvarla a ella y a los demás niños que sacrifican.
No me gustó tanto como el resplandor, es la primera vez que prefiero la película al libro apesar del final de esta. 🤷🏼♀️
Me decepciona LO QUE ME COSTÓ terminar este libro, siendo que es de sk. Meses. Aunque me gustó saber que fue de la vida de Danny no fue para nada el estilo que esperaba, es más ciencia ficción que terror. Se hace mas llevadero a partir de la página 100, dónde se juntan todas las tramas y todo empieza a tener un poco más de sentido, pero de todas maneras se me hizo bastante tedioso. Tiene varios giros de trama interesantes y mucha acción pero en ningún momento me termine de meter en la historia. La relación entre Dan y Abra fue lo más bonito y rescatable del libro.
Dany Torrance , aquel niño aterrorizado del hotel overlook, se ha convertido en un adulto alcohólico y sin residencia fija que vive atoermentado por sus visiones y por los fantasmas de su infancia , que ha aprendido a controlar pero no a eliminar de su mente. Un día se siente atraído por una ciudad de new hampshire, de dónde le llega la visión de abra stone, una niña que necesita su ayuda la persigue una tribu de seres paranormales que vive del resplandor de los niños especiales, y precisamente el de abra tiene mucha fuerza...Danny sabe que sin su ayuda nunca conseguirá escapar juntos emprenden una lucha epica, una batalla sangrienta entre el bien y el mal. El libro me gustó mucho No llega a ser como el resplandor Pero le da un buen cierre a la historia de Danny Lo recomiendo 😁
Es difícil hacer una secuela, porque todo la gente espera que sea igual de buena que la primera obra e incluso más pero no quieren cambios, que no se explore nada nuevo. Sin embargo, el autor sabe hacerlo, nos lleva a recorrer la vida de Dany, ese niño que casi fue asesinado por su padre pero que ahora siendo adulto está siendo asesinado por el mismo, pero que tiene otra oportunidad de redención por medio de ofrecerle ayuda a una niña, niña con la que está conectado, vaya a saber quién porque, al ofrecerle ayuda no sabe que tendrá que enfrentarse con aquello que ha estado evitando toda su vida.
Tal vez me habría gustado más si fuera una historia cualquiera y no la "continuación" del resplandor. Me agradó la evolución del personaje de Dany y cuando por fin se asienta, de igual manera el personaje de Abra y quienes los rodean. El trabajo en la residencia de ancianos me conmovió por completo. Pero los villanos de la historia jamás me terminaron de convencer. La historia es más bien regular, ninguna obra maestra, pero siempre es agradable encontrarse con los viejos amigos que nos acompañaron en libros anteriores.
Una de las mejores novelas del maestro, sin dudas. Atrapa y trae nostalgia luego de "El Resplandor". Ver la evolución de Danny, dándole el protagonismo a un nuevo personaje. Siempre da gusto saber cómo continúa la historia de un personaje querido. En mi opinión, esta vez, la secuela superó a la primera historia.
Empujó el pensamiento al interior de un armario mental, una habilidad que dominaba. Había toda clade de cosas en ese armario.
Todos somos moribundos. El mundo no es más que una residencia de cuidados paliativos con aire fresco.
—Todo va bien —le tranquilizó Dan—. Solo necesita dormir. El sueño le hará bien. —¿Es así como lo llamas? —Sí. Lo llamo «sueño». No hay peligro en el sueño.
Eres alegre, lo cual es importante, eres pícaro, lo cual es aún más importante, y tienes un bonito culo, lo cual es importantísimo. El trasero de un hombre es el pistón que empuja el mundo, y el tuyo es estupendo.
Pero el tiempo cambiaba. Solo los borrachos y los yonquis comprendían eso. Cuando uno no podía dormir, cuando uno tenía miedo de mirar alrededor por lo que pudiera ver, el tiempo se alargaba y le crecían afilados dientes.
En momentos así, no lamentaba el dolor ni el pesar ni la ira ni el horror, porque todo ello le había traído a esta habitación mientras el viento lanzaba alaridos en el exterior.