DIEZ DIAS EN UN MANICOMIO

En septiembre de 1887, Nellie Bly ingresa a un psiquiátrico en Nueva York como infiltrada, para escribir un artículo acerca de estos lugares para el periódico New York World. Nellie Brown, como se hizo llamar, conoció durante 10 días la realidad de cientos de mujeres que habían sido enviadas allí como locas, aunque a su criterio muchas estaban tan cuerdas como ella misma. Dentro, se encontró con un lugar aterrador, en el que las mujeres eran sometidas a baños de agua helada, a ropa liviana y ningún sistema de calefacción, a comida muy precaria y muchas veces a las torturas infligidas por las enfermeras bajo la mirada indiferente de los médicos. Luego de su experiencia, Bly da a conocer a su país los maltratos a los que son sometidas aquellas mujeres que deberían estar siendo tratadas para curarse, cuestiona los criterios médicos para considerar a alguien como loco, y se pregunta cómo alguien cuerdo podría seguir siéndolo después de estar encerrada en aquel sitio de torturas. La crónica es un relato estremecedor y Bly, una mujer muy valiente, ya que se sometió por voluntad propia a una situación donde era muy vulnerable y que podría haberse extendido de forma indefinida, lo que de solo pensarlo causa terror. Su trabajo de infiltración al parecer tuvo un resultado positivo, pero siempre cabe la duda de cuánto de eso aún sigue ocurriendo, en una sociedad en la que tratamos de ocultar los trastornos psiquiátricos y a quienes los padecen.