¿Sabías que el origen de la palabra brindar está en los griegos y era una muestra de confianza del anfitrión a sus invitados, porque al chocar las copas se intercambiaban los contenidos de estas y así se sabía que no era intención del anfitrión envenenarlos? ¿Sabías que el “tocino de cielo” hace alusión a un premio que hay colgado en el Paraíso para los casados que no se han arrepentido nunca de haberse casado? Y como este “tocino de cielo” está sin empezar, aún no ha habido ningún casado que no se haya arrepentido alguna vez de haberse casado.