Durante una revisión en una base, la computadora de la Enterprise es programada de una forma muy singular: se le ha introducido una variante por la que se enamora del capitán Kirk; una actitud que acompaña con un (comprensible) desprecio por las órdenes del resto del personal, especialmente femenino. Y ello está sucediendo cuando los romulanos se disponen a ocupar un planeta, que es necesario para su supervivencia, y con ello, abrir un peligroso foco de tensión.