“Yo quería una hermana menor, para poder mandarla. Pero ahora que la tengo, me arrepiento . Es completamente fatal ... Tengo que llevarme todo el día haciéndola aparecer. Porque mi hermana Ji es lo más desaparyque hay, y también es creída.” Papelucho se ha transformado en el guardián de su hermanita. Es el único que, cada vez que la Ji desaparece o juega a ser otra persona puede descubrir adioses ha ido. Entonces , analiza las pistas que los demás ignoran y logra dar con ella entre las flores del jardín, en el techo de la casa o en la fuente de la plaza buscando sapos. La quiere como a su propio yo, aunque le parezca tremendo tener una hermana “atrasada de noticias “ y con “complejo de evasión”.