LOS RECUERDOS DEL PORVENIR

13. Los recuerdos del porvenir de Elena Garro (4 de marzo). (Club mágico de lectura) Debo empezar diciendo que lo que más me ha gustado de este libro es el narrador, un pueblito llamado Ixtepec, se me hizo muy tierno e interesante, ya que creo que existen miles de historias sin contar atrapadas en cada rincón del mundo. Ixtepec habla de sus calles, sus casas, sus montes, su plaza, su iglesia, su hotel, aunado con la narración de los sucesos que ahí ocurrieron con sus habitantes. En este libro nos cuentan la historia de dicho pueblo después de la Revolución Mexicana, en donde las familias se ven amenazadas por los militares que llegan a gobernar, el que está al mando es el sargento Francisco Rosas, quien es violento, sanguinario y déspota, en la primera parte del libro nos cuenta cómo vivían las familias de Ixtepec bajo su mandato, siempre atemorizados por los cuerpos que encontraban colgados o asesinados todos los días, en las calles, esto, según los pobladores era a causa de Julia, la amante del sargento. En la segunda parte, ya se nos muestra a Francisco Rosas, siempre violento, pero ya en decadencia debido al abandono de su amante, quien huye con Felipe Hurtado, un forastero que llega al pueblo en su búsqueda. Este libro está lleno de anécdotas, historias, momentos, en los que siempre están presente la memoria, el tiempo y la ilusión; esa memoria de pronto recuerda cosas muy antiguas o piensa en los momentos futuros. Hay quienes viven encerrados en el pasado, como en el caso de Julia, o quienes viven casi siempre en el futuro. El tiempo también juega un papel muy importante, ya que en varios capítulos, el mismo Ixtepec lo comenta, pareciera que aquél se detuvo, como cuando se espera que vayan por Felipe Hurtado, al enterarse que en realidad sí llegó buscando a Julia (en la primera parte), o cuando el pueblo organiza una fiesta y Francisco Rosas tiene que retirarse pero promete regresar y obliga a todos a seguir bailando, comiendo y bebiendo por horas y horas y horas (en la segunda parte). Y la ilusión que, según Felipe Hurtado, era eso lo que le hacía falta al pueblo, y es que empiezan a reunirse a platicar, a realizar obras de teatro, creo que la ilusión es el motor que nos empuja a llevar a cabo nuestros proyectos. Cada personaje se me hizo entrañable, Juan Cariño, los Moncada, las cuscas, doña Dorotea, el sacerdote… se me hizo una historia bien contada, una hermosa narración con detalles poéticos que lograron esa atmósfera envuelta en lo que más adelante se conocerá como realismo mágico, que después explotaron Juan Rulfo, Gabriel García Márquez. En el caso de las acciones llevadas a cabo por los militares me recordó a Los de debajo de Mariano Azuela, cuando llega un momento en que se preguntan para qué están haciendo todo ello, ya no saben el propósito, y pasa en muchos ámbitos de la vida, realizamos las cosas por inercia, por costumbre sin saber ya para qué, siempre debemos tener muy claros nuestros objetivos para que todos los esfuerzos giren en torno a ello, para alcanzar metas. Para finalizar, es un libro icónico sobre la época de la Revolución Mexicana, es un libro bello por el lenguaje que emplea con unos personajes maravillosos, con un narrador que me encantó, y por supuesto es escrito por una mujer mexicana, Elena Garro, que ya tenía mucho tiempo queriendo leerla. Vale mucho la pena leerlo, se los recomiendo.

Es una novela bien preciosa, la mejor que he leído. En ella encontramos muchas de las narrativas particulares de Garro, así como sus preocupaciones y obsesiones. Es una historia plenamente circular, que tiene un final pero difícilmente un inicio. ¿Dónde empieza? Es la pregunta que jamás se puede resolver. Es un tiempo que aún no existe pero ya fue vivido en la vida de todos los lectores.

Elena Garro, mujer que no se conformaba, probablemente por eso fue olvidada ,eclipsada por su ex esposo y por todos en su época; novela de realismo mágico, describe perfectamente el ir y de venir de México y Latinoamerica atravesados las distintas guerras internas, para los que es conveniente, generan guerra y disturbios sociales ,para después olvidar a los que siempre se olvidan, "los caidos" , No, nadie venía. Nadie se acordaba de nosotros.Solo éramos la piedra sobre la cual caen los golpes,repetidos como una imperturbable gota de agua., Difícil ser mujer para esa época, difícil ser escritora; mujer de realismo mágico muy bien logrado; este libro merece ser leído por muchos y muchas en esta generación y todas las venideras.

Al principio no me enganchó, pero decidí avanzar y me sorprendió la forma en qué la historia me fue atrapando. Al final me encantó

Cuando escuché por primera vez el nombre de Elena Garro y el de su obra Los recuerdos del porvenir, sinceramente la menosprecié. Yo estaba enfrascado en la lectura de los clásicos y no creía que hubiera algo bueno fuera de ahí. Tuvieron que pasar algunos años para que despertara mi interés por ella. Un día leí su biografía y me simpatizó su rebeldía ante el poder y su lucha por las causas sociales. Fue así que empecé a leer su obra. Primero fue Inés y otros años después Los recuerdos del porvenir. Jamás imaginé que esta novela me atraparía. El pueblo de Ixtlán me retuvo tal como a sus habitantes. La diferencia es que mientras ellos estaban retenidos por los militares, yo estaba encerrado en un sueño de emociones y de placer estético. Desde entonces, vuelvo cada año a este pueblo a revivir con gusto la tragedia de su población.