Entre 1900 y 1910, varios artistas promovieron en Bilbao un ciclo de exposiciones de arte moderno con las que pretendían dar a conocer tanto sus trabajos como los de creadores de la talla de Gauguin o Picasso. Aunque aquellos pioneros del arte contemporáneo sintieron que sus esfuerzos terminaron en fracaso, sembraron una semilla decisiva. Javier González de Durana reconstruye en Las exposiciones de arte moderno de Bilbao (1900-1910) aquel histórico y hasta ahora poco conocido capítulo de la difusión del arte, mediante las cartas, noticias, reseñas y documentos públicos que testimonian aquella primera gran apuesta por la modernización de la escena artística del momento.