El diario de trabajo del gran director ruso: un conjunto de lúcidas reflexiones surgidas al afrontar los distintos aspectos de su tarea como creador cinematográfico: el guión, los actores, las tomas, el montaje, la música.
Magnífico. El diario de filmación de Tarkovski excede lo cinematográfico. Un lenguaje poético y reflexivo, encierran la ética y filosofía del maestro ruso.
Tarkovsky decía que hay dos tipos de artistas: los que reproducen el mundo, y los que crean su propio mundo. Entre estos últimos ponía como ejemplo a Buñuel y Fellini. En este libro nos explica sus reflexiones acerca del cine como creación poética y las dificultades con las que un creador se enfrenta, especialmente si has nacido en una Unión Soviética que no tolera el arte como expresión individual.
Una magnífica perspectiva de qué puede hacer con nuestra vida el cine y a qué valores superiores ha de estar adherido este joven arte. Asimismo, Tarkovski reflexiona acerca de la naturaleza del autor y hace hincapié en diferenciar la honestidad de ciertas obras frente a la impostación de otras. Se trata, pues, de una lectura práctcamente obligatoria para cualquiera que desee adentrarse en los mares más profundos de eso que llamamos cine.
"El artista no tiene ningún derecho moral para dejarse llevar a un abstracto nivel medio, para hacer que su obra sea más comprensible, más accesible. Esto no acarrearía otra cosa que la decadencia del arte, cuando en realidad esperamos su florecimiento".
"La única comunicación adecuada con el espectador es: permanecer fiel a sí mismo. Sin concesión alguna a esos espectadores que exigen que les entretengamos. A la vez, los directores hemos empezado a despreciar tanto a esos espectadores, que estamos dispuestos a entretenerles".