LA LADRONA DE LIBROS

A veces siento que no sabría ofrecer una crítica objetiva de esta extraordinaria novela, y creo que esa palabra resume bastante mi opinión de ella. He leído varias historias y novelas relacionadas con la Alemania nazi, con campos de concentración y temas similares, pero ninguna ha sido tan única como esta. Algo particular que tiene esta novela es el hecho que ésta es narrada por La Muerte, y tal vez mucha gente podría asombrarse de primer momento al escuchar esto, pero sí, es La Muerte quien nos lleva de la mano por las páginas de esta conmovedora historia. A lo largo de la trama pude identificar ciertos aspectos que, de manera particular, caracterizaron a esta acompañante de camino: la primera de ellas es la forma tan poética en cómo nos va narrando la historia como testigo de todo lo que está ocurriendo. También, aunque parezca extraño, La Muerte también expresa sentimientos y hasta se conmueve de los injustos acontecimientos que presencia. Así mismo, La Muerte posee una sabiduría particular que la distingue de los demás y la hace única. Es siempre directa y busca no andar con rodeos. Y, por último, de manera personal, fue siempre un poco difícil el atribuirle un género (en caso que queramos adjudicarle uno), pero me inclinaría por un género femenino por la forma en cómo nos acompaña en la historia. Por otro lado, está la vida de un pequeña localidad alemana, Himmelstrasse, en la que llega a vivir Liesel Meminger, a raíz del conflicto nazi. Una niña que descubrirá el valor de las palabras en ella, para ella y para los demás, y cómo éstas pueden también pueden ser condenatorias para algunos en medio de una sociedad donde, podría decirse que, la libertad de las palabras eran algo prohibido. Finalmente, sólo puedo decir que fue una novela que deja una marca en nuestra mente y en nuestro espíritu, y que puede llegar a sacar de nosotros sonrisas, angustias, lágrimas, entre otros sentimientos… Espero que la disfrutes tanto como yo lo hice.

La ladrona de libros también te robará el corazón si te permites trascender al particular enfoque en que está narrada su historia. Es tan sutil que no te das cuenta, el relato es en su comienzo plano, lento, y las emociones de sus personajes no se consideran, por ello parece a priori una narración sin alma. La extraña narradora se limita a relatar lo que ve y lo que ocurre, no empatiza con los personajes, supongo que para ella sólo las ollas conocen los vapores de sus caldos. Nos deja libre albedrío para que les dibujemos el alma, cada uno de nosotros lo hará en función de sus propias experiencias y de su bagaje particular; es por ello que este libro podrá tener millones de lecturas diferentes. Lo he leído traducido, algo que me horroriza y siempre trato de evitar porque en estas ocasiones he de limitar mi valoración a la historia pero no puedo valorar la calidad de sus letras ya que considero que no sería acertado y mucho menos justo. En esta ocasión las continuas alusiones a expresiones originales en alemán han hecho que sienta que la traducción ha sido un sumidero por el que se ha colado toda la fuerza literaria de este escrito. La consabida y triste historia del holocausto judío esta vez contada desde el otro lado, cómo vivieron los alemanes este lamentable trozo de historia. La estructura y el enfoque son originales y absolutamente extraños, pero conforme se avanza y se va aproximando el final sientes que tu corazón se encoge, no te has dado cuenta y te lo han arrebatado.

Extrañamente curiosa, sorpresiva, inesperada. Es la mejor manera que tengo de definir el regusto que me ha dejado su lectura. Me resulta poco acertado calificarla como lectura juvenil, o es que tal vez mi espíritu, a mi edad, se esté rejuveneciendo sin que yo lo perciba. Me ha gustado, me ha enternecido, me ha ayudado a absolver gran parte de la humanidad y a agudizar mi rechazo hacía otra gran parte de la misma. En definitiva, es una novela "bonita".

La historia más hermosa que he leído, lloré de a montones.😭 Al inicio se me hizo un poco lenta la lectura, pero a medida que avanzaba me atrapó por completo. Liesel, una pequeña niña que atrapa el corazón de cualquiera, es entregada por su madre a Hans y Rosa para que cuiden de ella, poco a poco se convierten en una familia ejemplar. Rudy, su mejor amigo siempre está para ella y tienen una relación envidiable, y es este quien le ayuda a robar libros una vez entablada la relación. Aunque en un inicio estos niños no entienden muy bien por todos los problemas que está pasando su país, debido a la guerra, a medida que crecen lo van entendiendo, llenándose de rencores y dándose cuenta de quiénes son las plagas realmente. Nunca había leído una historia ambientada en la segunda guerra mundial desde el punto de vista de un alemán. Y el narrador, pues, poco a poco lo vamos descubriendo.🤭

Septiembre 2020 Emotiva novela situada en la Alemania nazi que cuenta la vida de la pequeña Liesel. Narrada en primera persona por La muerte, que persigue y casi desde el inicio va atrapando inexorablemente al entorno de la pequeña. Pese a ser una obra conmovedora y tierna contada a ratos de una bonita forma a los ojos de una niña, las sensaciones de injusticia y crueldad no abandonan al lector casi en ningún momento...Libro no apto para lectores sensibles...Desgarrador

Una historia conmovedora, donde los hechos ocurren dentro de la devastadora época nazi, narrada por la “parca” como le gusta que la llamen, sobre las andanzas de una niña, víctima de las consecuencias y que me ha dejado un sabor agridulce. La historia está contada de una manera muy dulce, y está llena de valores y humanidad. Me ha parecido un libro escrito con cariño a pesar de todo.

Voy a robar las palabras del autor para mi reseña. Es un libro espléndido y terrible a la vez. Rudy y Hans se ganaron mi corazón. Todos los personajes son extraordinario. El ritmo del la historia, los detalles, todo esta en perfecta sincronía. Esta de más decir que llore al principio, en el medio y el final.

Un libro diferente a todo lo que he podido leer en relación a la temática nazi. En ocasiones me ha gustado, en otras se me ha hecho un poco pesado sobre todo porque pensaba que iba a estar enfocado desde otra perspectiva