El amor, en el sentido budista –que implica compasión, alegría y ecuanimidad–, es la clave de una vida plena y libre, capaz de superar el miedo, la soledad y la angustia. «Sin amor la vida es imposible», dice el autor. «Debemos aprender el arte de amar. Necesitamos apoyarnos unos a otros para formar una comunidad en la que el amor sea algo tangible. El bienestar del mundo depende de cómo vivamos nuestra vida cotidiana, de cómo amemos». El maestro vietnamita Thich Nhat Hanh es uno de los principales impulsores del budismo zen en Occidente, muy popular en Europa y Estados Unidos.