La dramaturga y directora de escena Angélica Liddell (Premio Nacional de Literatura Dramática, 2012; León de Plata de la Bienal de Teatro de Venecia, 2013) desentraña en estos textos la relación entre el sacrificio y lo poético. En diálogo con Diderot, Pasolini y el mito de Abraham, abre una brecha desde la que observar el mecanismo que transforma el acto individual del sacrificio en acontecimiento político. La libertad se alcanza así a través de la exposición del cuerpo en escena en su máxima vulnerabilidad y desprotección. Con prólogo de Christilla Vasserot, profesora de la universidad Paris 3- Sorbonne Nouvelle (Francia), traductora y especialista del teatro de Angélica Liddell. Edición a cargo de Cornago, Óscar y Sandra Cendal.
Angélica, pura, directa, sin pelos en la lengua, quizás pesimista, pero fiel a ella misma. Es radical, pero si si lees más y más sobre su teoría de la vida y su historia lo entiendes todo. Es un punto de vista muy interesante sobre la vida, la sociedad y el arte. Siempre recomiendo a Angélica a los amantes del teatro, también recomiendo que no empiecen por esta cara de la moneda. Esta artista es un mundo y si se la quiere conocer un poco más recomiendo un documental llamado: Angélica. Una tragedia.