Del más reputado e influyente crítico literario de los últimos años, llega un fascinante paseo por el mito de los ángeles caídos. «Deseamos que los demonios y los diablos nos entretengan, a una prudente distancia, y que los ángeles nos reconforten y cuiden de nosotros. Pero los ángeles caídos resultan incómodos por su proximidad al ser humano, puesto que en parte y en definitiva, no somos sino ángeles caídos.» De El ángel caído.