Escritos en la sonora década del 60, Cuentos crueles anticipó la violencia, la crueldad y la exasperada prepotencia de los años siguientes.Una pareja intensidad recorre las historias de este libro: el descubrimiento del deseo en una tarde de siesta y el recuerdo de ciertas emociones que nunca deberían escribirse; el patético desencanto de un hombre frente a otro mientras el universo gira en torno de una estufa; la madrugada de un 9 de octubre de 1956 y la emboscada que sufre un improvisado grupo de combatientes leales a Perón; las ceremonias de la escritura desafiando la pérdida del amor y sus liturgias; el desamor frontal y la venganza de una mujer humillada (este último, uno de los cuentos más estremecedores de la literatura latinoamericana, llevado al cine en 1995, por Jorge Rocca y galardonado con el Premio Festival de Gramado, cuyo jurado estuvo presidido por Alan Robbe Grillet).¿Hay algo más real que los infinitos ropajes de la crueldad? Con argumentos ceñidos, silencios tensos, presencias amenazadoras lindantes con la locura, y un estilo exacto y despojado cuya intensidad carga la crudeza y el realismo, Abelardo Castillo conmueve por la seguridad y lucidez de su obra.