¿JUGAMOS?: AL FIN Y AL CABO LA VIDA ES UN JUEGO

Quiero hacer especial hincapié en que yo soy una novata total en historias con personajes principales LGTB y me ha sorprendido mucho. Quiero aclarar que no leo este tipo de historias no porque no me gusten, sino porque no siento curiosidad por ellas porque no me siento identificada con sus preferencias sexuales. No penséis ninguna cosa rara, por Dios, que estamos en el S. XXI. He de decir que la calidad del libro no tiene nada que envidiarle a uno de publicación tradicional. Ya me conocéis: fiel defensora de la autopublicación. Tenía claro que iba a leer la historia rápido porque le forma en la que está narrada te atrapa desde el primer momento; es como estar charlando con tu amiga de su vida. Es una lectura muy acogedora porque conoces los miedos, las dudas, las preguntas y las incertidumbres por las que pasa Ana, que es la protagonista principal y quien nos cuenta su historia. En ningún momento se me ha hecho larga o pesada la narración a pesar de las idas y venidas porque los vaivenes emocionales de la protagonista son muy humanos y reales; es algo por lo que considero que pasamos todos, independientemente de cual sea tu preferencia sexual. Quizá sí he sentido que me hubiera gustado saber más de la historia de Carla, porque creo que es un personaje muy interesante, con mucho fondo y que en su cabecita pasan infinidad de cosas. Creo que su historia merece ser contada. De la primera página a la 300, me bebí el libro. Sí me atasqué un poquito más hacia las últimas 100, pero como en todas las historias, tenía sus subidas y sus bajadas.   Probablemente esto que acabo de decir y que hay alguna errata que otra —cosa que es normal— es lo peor que le puedo sacar al libro. El final me ha gustado mucho porque todos los personajes cierran ciclos y empiezan otros. Sin embargo, yo que soy una adicta al salseo, me hubiera gustado algo más explosivo pero, vaya, que la historia es un bombazo y estoy segura de que TODOS nos sentiríamos reflejados con alguno de los personajes. Yo tengo claro que soy una mezcla de Carla y Ana.