VERANO Y AMOR

A esta gran obra de la literatura contemporanea, el delicado refrán " más aburrido que chupar un clavo" le calza a la perfección. Dios mio, que tediosa!! Hago mea culpa: me dejé engatusar por opiniones del estilo de " considerada una verdadera obra de arte" o " sumamente sensible y conmovedora". Asi que yo entré como un toro, pañuelo en mano preparada para ser arrollada por toda esa sensibilidad...😐Pues parece que la dichosa sensibilidad se me ha ido por los caños porque además de dormirme con los anteojos puestos y la boca llenando de baba al ereader, de emotividad y llanto desenfrenado NADA. Aclaremos: el libro no es nefasto. Si uno lo mira con cariño es una oda poética a Irlanda y a su gente. En cuanto lo vemos con un poco mas de objetividad, resulta ser un bodrio de aquellos con romance chungo y un infierno de descripciones eternas. ✋Sí. Ya lo entendí: Irlanda es hermosa. No lo dudo. ¿¡Cómo diablos podría dudarlo sí este muchacho me relató hasta el cansancio lo bello que es hasta el último condenado trebol de cuatro hojas en tan precioso país?! Llega un momento que preferis agarrarte los dedos con la puerta antes de leer otra vez una descripción en verdad que detallada del maldito granjero arreglando la cerca, juntando las ovejas o haciendo manteca. PEEERO, alto ahí!! Está bien escrito!...😑 saben qué? No tanto. El trevor este se cree que escribió el Pedro Paramo irlandes y mezcla narradores sin previo aviso haciéndote decir "ehhh??? ¿Qué? ¿Cómo? ¿Cuando? ¿ Me dormí otra vez?" En fin, moraleja: las opiniones ajenas son eso, solo opiniones. No se dejen llevar por ellas. Tampoco por las mías.

Hacer una reseña de este libro resulta un POQUITÍN complicado… Demasiado… Un pueblito en medio de toda Irlanda llamado Rathmoye, lleno de descripciones e imágenes que va generando el autor con su escritura meticulosa, envuelve a sus habitantes. Presentación importante para el autor y lo que quiere mostrarnos, descripciones que se hacen pesadas… Y Sííí! En algún momento decimos listos!!! Las personas, campesinos que atraviesan el pueblo todos los días abren el telón, con sus historias, retratando lo que es convivir en dicho pueblo y cuán pequeño puede volverse al saber la vida de los unos y los otros. Aunque, el tema central es la historia de Ellie y Florian. Una, casada con un granjero sufrido por su atormentada vida pasada y el otro, un fotógrafo que se presenta sin más a revolver la vida cotidiana de algunas personas, incluyéndola. Una presentación que quizás podría generar algo de curiosidad pero nuestro querido Trevor nos llena de pedacitos de vida de los pueblerinos y la pequeña novela de pocas páginas se vuelve densa. Me lleva de un lado a otro y me deja a la deriva sin comprender, y muchas veces hizo que me preguntara “¿que sucedió o de quién me hablaba?”. Pero finalmente (esto lo digo yo, no sé qué dirá mi compañera 😆 que sufrió un poco más aunque hubo partes que yo no entendí y si no me explicaba no entendía 🙄) los últimos capítulos se hicieron más llevadero, dándome un poquitín de adrenalina (👀) y ayudándome a terminar. Y haciendo que mi puntaje suba… media estrella 🙈 y luego de mucha reflexión. Los comentarios la pintan realmente como una obra de arte pero como le dije a Maren no sé si serán todos muy eruditos y nosotras las burras o qué, pero yo no pude descubrir toda la belleza que me mostraron y pagué una entrada muy cara. ¿La recomiendo? Uf qué difícil, hay personas que quizás aprecien más su escritura y descripciones. Realmente hay muchísimos comentarios positivos, no sé si la entienden o sienten más, o solamente se dejan llevar por la corriente y todos aplauden y ya! Así que sí, otros podrían valorarla mucho más, ¿yo? Tuve suficiente, gracias! 😬

Una narración tan bucólica como los verdes paisajes de Irlanda. La llegada de un extraño al pueblo causa revuelo, sobre todo en el corazón de una joven granjera que transcurre sus monótonos días con un esposo atormentado por la culpa. Una pasión que se enciende en verano y tiene muy pocas chances de perdurar en el tiempo. Lectura bastante lenta que logra despuntar (solo un poco) en las últimas páginas.

Una historia de amor muy poco definida en un conjunto bastante pretencioso que alterna diversos personajes son llegar a profundizar en ninguno.