Ulises Jiménez tiene catorce años y medio y quiere ser escritor. Para inspirarse en su primera novela, planea un viaje en moto con su mejor amigo. Pero todo falla cuando sus padres le dan la noticia: se van a Madrid a ver monumentos y piedrecillas etiquetadas en vitrinas de museos. Ulises se salva del verano más aburrido de la historia metiéndose en un lío gordísimo, en el que están implicados los macarras de la banda del Trucha, el repelente de Froilán Frontera y un hombre llamado Ramón Estrella, que le enseñará a Ulises los misterios que se ocultan en el metro de Madrid.