Al desaparecer su padre, dos años atrás, Tony y su madre, Niza, se han quedado varados y solos en Garnys - un planeta congelado y desierto - en espera de ser rescatados para volver a la tierra. Extrañas voces los acosan y los sumergen en el miedo y la desconfianza, pero un giro sorprendente cambiará sus destinos. El terror y la esperanza se mezclan en esta historia de ciencia ficción y fantasía que podrán disfrutar tanto jóvenes lectores como adultos.
Una historia con mucho potencial pero que creo se queda corto y el final no explican algunos misterios que me hubiera gustado saber. La trama y desarrollo es bueno, la atmósfera del lugar donde se encuentran Tommy y Niza, las circunstancias, el encuentro con lo que podría decirse habitantes del planeta Garnys, y aunque se que es una metáfora a lo que representa la búsqueda de la esperanza, el final no me convenció y me quedé con ganas de más.
Es entretenido y en algunas partes interesante, pero deja muchas cosas sin explicación. Sé que es un cuento infantil que hasta cierto punto sabe desarrollar el tema de la pérdida y la esperanza, pero desde el inicio la historia es sumamente predecible, por lo que el final no causó ninguna emoción en mi
-Sí. Papá se perdió y nosotros nos quedamos abandonados en el mismo umbral de la Tierra.