En esta obra titulada Tríptico: Los últimos días de Mnemosine, el autor intenta reflejar en su lenguaje poético tres cuadros o paisajes desoladores que abren la herida a la memoria histórica de Europa. El primero, Ángelus para Roman Radik, se sirve de este personaje, medio ficticio y medio real, para denunciar la sustracción de su identidad y de su cultura tras la guerra de los Balcanes