TRÍPTICO DEL DESAMPARO

Desconcertante. Lo leí esperando una historia, y terminé siendo totalmente diferente. De esos libros que te dejan con muchas preguntas por responder. Me encantó

¿Qué hicimos con las oportunidades que se nos concedieron? ¿Estamos condenados a la libertad? Son las preguntas que me resuenan al terminar la lectura. En ella, el escritor, nos lleva con su prosa por un hermoso camino sinuoso en el que conviven el realismo y los elementos mágicos sin contradicción ni límite de tiempo. Lo antiguo y lo nuevo se rozan, provocan desconcierto y nos atrapan como en el símbolo del infinito en el que principio y final se unen. La trama es como una madeja que no se puede soltar. Personajes que se perfilan, crecen y se revelan conforme avanza, y la poderosa imaginación del autor que nos propone un viaje exterior e interior en el cual escritor, personaje y lector se confunden en el mejor de los significados. Una lectura que compromete los sentidos, desafía con su profundidad filosófica, sorprende y fascina, que parece confusa y, sin embargo, tiene su lógica. Porque su coherencia ocurre como en los sueños, parece ausente y, sin embargo, está allí, en el próximo párrafo que, si leemos atentamente, resultará revelador. ¡¡Muy buena novela!!

Sentada frente a un hogar, escuchando el crepitar del fuego, en la penumbra de algún salón medieval. Sus altos muros de piedra cubiertos de anaqueles rebosantes de libros antiguos. Cientos de libros con sus hojas amarillentas, sus lomos de letras doradas con el brillo que alguna vez tuvieron ya desvanecido, pero en su interior la sabiduría intacta y las claves para encontrar el sentido de nuestra existencia todavía allí están esperando que las descubramos. Virginia Woolf decía que los libros son el espejo del alma. A ese escenario me transporta la lectura de los libros de Pablo Di Marco y de eso se trata Tríptico del desamparo, de reconocernos en el reflejo de un libro. Rafael Leone, el protagonista de esta historia, transita su juventud bajo las sombras de un cementerio, con el peso de la desolación y la desilusión que lo agobia. Pero en su camino se cruza Irene Vidi, una mujer ya en sus 60 y tantos años; ella será quien lo rescate de la oscuridad de sus días. Sabrá Rafael aprovechar esa oportunidad única que le da la vida o el ansias de querer más y más lo hará perder lo valioso que tiene entre manos, y con el correr de los años descubrir que vuelve a estar atrapado en el mismo desasosiego de sus años de juventud?. La historia nos llevará a una Venecia colapsada por una gran inundación, un paisaje desolador, sombrío, dantesco. Rafael, ya transitando su vejez, irá a ese remoto lugar en busca de Irene que se encuentra agonizando. Allí entramos junto con los protagonistas en un inframundo, apocalíptico y fantástico. El misterio y la tensión del relato nos hacen adentrarnos más y más en laberintos oscuros, fétidos, fantasmal. Tenemos que acompañar a Rafael en la búsqueda del sentido de su existencia, pero debe él solo encontrar la salida, la luz que ilumine sus dudas y temores. Personajes delineados con gran maestría, inolvidables. Una historia que nos habla de logros y fracasos, de juventud malograda, de amores perdidos y del paso inexorable del tiempo. Uno de los mejores libros que leí esta cuarentena. No lo dejen pasar, descubran ustedes también a este gran escritor.